El talaverano marcó tres goles en el espacio de 18 minutos y Trashorras, Papadopoulos y Aspas se estrenaron
06 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.El Celta demostró su pegada ante el Ourense de Tercera, pero también parte de sus problemas en defensa ante un rival de inferior categoría. David Rodríguez volvió a emitir las mejores noticias con un hat trick en poco más de 30 minutos que estuvo sobre el campo. Trashorras, Papadopoulos y Iago Aspas por su parte marcaron los primeros goles de la pretemporada.
El primer tiempo del ensayo de Ourense permitió ver a un Trashorras colocado en un doble pivote puro, aunque con tendencia a aprovechar el carril central teniendo en cuenta la escasa oposición del conjunto ourensano. Fue el de Rábade quien aprovechó una de sus llegadas al balcón del área para marcar su primer gol estival con un disparo desde la frontal.
Durante este período el Celta fue un equipo asimétrico. Intentó jugarlo casi todo por la derecha, pero hizo más daño por la izquierda. Toni se caía al centro, casi en la posición de media punta que ocupaba Michu (porque Herrera volvió a ensayar con el 4-2-3-1) y dejaba un pasillo para que Lago hiciese daño subiendo la banda. En uno de sus centros llegó el tanto de Papadopoulos. El griego hasta el momento tiene en el Ourense a su equipo preferido. Le marcó en su primera pachanga de celeste y lo volvió a repetir ayer.
Pudieron caer más, pero en la única llegada de los rojillos también se puso en evidencia los problemas defensivos celestes. Víctor Vázquez no protegió bien un balón y Arenas estuvo a punto de hacer pleno.
Pleno
El segundo tiempo fue una lección práctica de pegada celeste. Especialmente por parte de David Rodríguez, que en la media hora que estuvo en el césped no solo continuó marcando, sino que firmó un hat trick . Con goles de todos los colores. El primero, con un control excelso. El segundo con un fuerte disparo y el tercer con oportunismo. Se lo dio Iago Aspas después de una buena combinación y el moañés también se estrenó en la jugada más elaborada del Celta en todo el partido. En medio de este monólogo, Josu marcó en la primera llegada rojilla al rechazar el balón en Víctor Fernández y Prada aprovechó una licencia defensiva para maquillar el marcador a última hora.
El Ourense se rompió en este este segundo tiempo y apenas pudo presentar batalla a un rival que movió con holgura el balón y que buscó las bandas, especialmente a un Quique de Lucas que patiendo desde la izquierda parecía estar en todas partes y que demostró conexión con un David que ya lleva cinco goles en tres partidos.
Mañana toca en Paços de Ferreira en Balaídos.