Ha nacido un movimiento ciudadano en favor de otorgar la máxima protección a la Sierra de A Groba. Colectivos como el Instituto de Estudios Miñoranos, SOS Groba, Asociación A Groba o Salvemos Monteferro demandan a la Xunta que inicie el proceso para incluir la altiplanicie miñorana en la Red Natura 2000 para poner a salvo este espacio de cualquier interés especulativo que amenace su biodiversidad.
Uno de los objetivos principales de esta iniciativa es blindar el monte miñorano contra cualquier intento de poblarlo con los gigantescos molinos para el aprovechamiento de la energía eólica por parte de empresas foráneas.
Los colectivos asociados a esta iniciativa piensan que es incompatible el desarrollo de un parque eólico con el aprovechamiento sostenible de la enorme riqueza paisajística, etnográfica y biológica de este entorno. Creen que debe aprovecharse este momento de la presidencia española en la UE para tomar la iniciativa y otorgar el reconocimiento y protección que se merece uno de los pocos espacios que van quedando libres del afán del ladrillo que durante las últimas décadas ha ido convirtiendo en urbanizables suelos de la costa que constituían parte de la riqueza natural de la comarca de O Val Miñor.
Iniciativa del BNG
El clamor insistente por la preservación de A Groba ha encontrado eco entre los representantes del BNG en el parlamento europeo. La portavoz nacionalista en Bruselas, Ana Miranda, visitó recientemente el alto de la Groba para conocer este espacio de la mano de los miembros del Instituto de Estudios Miñoranos Xilberte Manso y Xosé Lois Vilar.
La parlamentaria coincidió en la necesidad de otorgar la máxima protección a este espacio y cree que sería una «aberración» la creación de un polígono de molinos de viento. Reiteró que tiene que ser la Xunta la que plantee la propuesta de inclusión en la Red Natura al gobierno central y este a su vez quien lo traslade a Europa. Colectivos de O Val Miñor trabajan por conseguirlo.