Morriña convertida en arte sonoro

VIGO

Este músico de origen gallego regresó de Venezuela hace cinco años y se ha dedicado a componer utilizando los paisajes sonoros de nuestro entorno como base

13 mar 2009 . Actualizado a las 11:33 h.

Galicia le ha dado a Carlos Suárez la oportunidad de poder dedicarle más tiempo a la composición. Aunque sus orígenes son gallegos, la mayor parte de su vida la ha pasado en Venezuela. Hace cinco años llegó a Vigo y este artista sonoro descubrió sonidos de los que le habían hablado, como el de los molinos, y que inspiraron algunas de sus composiciones musicales. «Lo que más me sorprendió al llegar fue que en los sonidos que grababa no se escuchaba el zumbido de los insectos», apunta Carlos.

Su música mezcla investigación sonora, creatividad y documentación. Cada composición se basa en un texto que él mismo escribe y en el que resume sus ideas de partida. El trabajo de campo, grabación de sonidos de su entorno, es el siguiente paso. Después, encerrado en su casa con un ordenador, une y crea capas de sonido hasta construir un discurso sonoro fiel a sus palabras. «Soy muy lento componiendo. Me cuesta mucho acabar una composición porque soy muy quisquilloso y tiendo a sobrecargar mucho de sonido», reconoce el artista.

En Vigo lleva compuestas unas quince piezas que ha colgado en Internet con licencias Creative Commons, de libre descarga. Sus primeros dos discos fueron publicados en el netlabel (sello discográfico en red) del colectivo Alg-a y están al alcance de cualquiera que quiera bajárselos. Uno de ellos lleva ya 3.500 descargas y el otro ya ha superado las 5.000. El tercer disco, que ya ha acabado, lo publicará un sello discográfico online gallego-vasco, Larraskito. Trabaja en un campo musical que tiene muchas dificultades para llegar al público y para entrar en los circuitos comerciales. «Todo lo nuevo en el arte en un principio no se entiende», se justifica. En Galicia no hay festivales de arte sonoro por lo que a los creadores de aquí no les queda otra que irse a tocar fuera.

Gracias a Internet y a la globalización, la labor de difusión de su obra le resulta más fácil. A través de su myspace contactó con él un sello alemán que está haciendo un disco recopilatorio en que incluirá un tema suyo y una discográfica americana que va a sacar en cedé algunos de los temas que Carlos ha colgado en Internet. «Entiendo que esta repercusión significa que hay buenas perspectivas en este campo pero sigo llegando de aquella manera a fin de mes», bromea el músico.

Escoitar

Desde su vuelta a Galicia, Carlos Suárez se ha convertido en uno de los miembros del colectivo escoitar.org , un proyecto pionero que pretendía servir como geolocalizador de los paisajes acústicos de Galicia y como archivo sonoro de elementos en vías de extinción. Un proyecto que nació sin apoyo de la iniciativa privada ni pública y que han imitado grandes ciudades españolas y otras comunidades con fondos públicos. Ahora el colectivo se ha propuesto ahora una nueva meta. Quieren realizar una radiografía sonora de los diferentes caminos de Santiago. Se trataría de grabar la acústica de 24 puntos diferentes de cada camino y recoger en un panel táctil lo que oyen los peregrinos que recorren las rutas. «Es un proyecto en el que hemos estado trabajando en los últimos meses y que vamos a presentar a la Xunta y esperamos que con el Xacobeo salga adelante», dice Carlos. La idea se completaría entregando esos sonidos grabados en los caminos a artistas sonoros de todo el mundo para que pudiesen realizar su propia interpretación de lo que se escucha durante las rutas de peregrinación.