La Europa de las controversias

JUAN MANUEL VIEITES BAPTISTA DE SOUSA

VIGO

19 abr 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

NORMALMENTE, escuchamos siempre aspectos relacionados con la Unión Europea en los que las apreciaciones se evalúan según la situación que se crea, haya sido mejor o peor, pero teniendo en cuenta que actualmente la capacidad de competir en los mercados, depende de parámetros económicos tales como la concentración, las barreras de entrada a las políticas reguladoras existentes, y que, la liberación necesita de la desregulación para su funcionamiento. El problema de este proyecto es que, de la esperanza a la desilusión hay un pequeño paso y que, no todo siempre es culpa del Gobierno de un país por muy malo que éste fuera. La estrategia se basa en aproximar posiciones. Y ahí si que, el que quiera conseguir sus objetivos, debe comunicar más y mejor. Y que decir con respecto a los sectores, sobrevive el que más rápido interprete los cambios y se adapte a las imposiciones del entorno. Es ahí, donde debe aparecer la respuesta eficaz de las asociaciones empresariales, reforzando sus posicionamientos y trabajando pacientemente, buscando dialogadamente, y negociadamente, los intereses a que representa. Además, las organizaciones bien estructuradas y con vocación sólida deben estar siempre a la expectativa, para aprovechar los beneficios de los movimientos de cambio, intentando caminar con fuerza y capacidad de influencia, usando correctamente sus estructuras. Toda una tarea para llegar a buenos resultados.