Cuatrero gallego al banquillo

La Voz L.P. | PONTEVEDRA

VIGO

09 sep 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

En el viejo Oeste, el de Billy El Niño y Pat Garret, a los cuatreros se les colgaba del árbol más cercano sin juicio previo. Más de un siglo después, un vecino de Vigo se enfrenta a un año de prisión por la sustracción de una yegua del país. Todo ocurrió, según mantiene el fiscal en su escrito de acusación, en el verano de hace dos años cuando el acusado, Eugenio D. G., «con ánimo de lucrarse» se apoderó de una yegua que se encontraba en el Monte da Guía, espacio geográfico ubicado en el municipio de Covelo. El animal había sido adquirido por su propietario, D. B. B., el año anterior previo pago de 900 euros. Las cosas no se quedaron ahí. A mediados del mes de septiembre del 2000, Eugenio D. G. cambió a un particular el caballo que supuestamente había sustraído por un poni. La yegua permaneció por espacio de varias semanas atada en una finca colindante con el río Lagares, ubicada en la viguesa avenida de Ricardo Mella. Hasta que un buen día, el propietario del animal y una pareja de policías locales se personaron en el citado lugar. D. B. B. no tuvo problemas en identificar a su caballo dadas sus peculiaridades características físicas y Eugenio D. G. fue detenido. Más de dos años después de la sustracción, hoy martes se celebrará en el Juzgado de lo Penal número uno de Pontevedra un juicio por estos hechos. Sea cual sea el resultado final, a buen seguro que Eugenio D. G, no será condenado a la horca.