El Dépor, triunfante al final, se enfrenta al Zaragoza, que dejó de ganar 10 puntos en los últimos lances
22 mar 2014 . Actualizado a las 12:58 h.El Dépor ultima los preparativos de un partido de doble filo en los minutos finales. Según las estadísticas, mañana (12.00 horas, Canal+ 1) se enfrentan dos equipos con comportamiento opuesto cuando el cronómetro se acerca al noventa. Los coruñeses se destacan como los líderes de los últimos instantes, mientras al Zaragoza esos mismos momentos le pesan como losas hasta destacarse como el más perjudicado al cabo de treinta jornadas de Liga.
En el bando deportivista las recientes victorias contra el Hércules y el Alcorcón, así como el empate final frente al Sporting subrayaron el éxito de un equipo que nunca se rinde, que exprime los partidos hasta la última gota y al que hasta ahora han sonreído un buen puñado de premios. No puede ser casualidad que haya ganado nueve puntos justo cuando el partido agoniza, pero nunca haya perdido ni uno solo.
El secreto de su éxito se vuelve indescifrable para el Zaragoza, al que los instantes finales lo han castigado en numerosas ocasiones. Tanto, que si hubiera sumado los diez puntos que ha dejado de ganar al final, saltaría hasta la tercera posición del campeonato, a un solo paso del Dépor. En cambio, ahora se ubica a cuatro puntos de la promoción y, ¡peligro!, a solo dos de las de descenso.
El traspié más reciente del cuadro maño se produjo hace dos jornadas contra el Mallorca. Se despidió entonces de una victoria que acariciaba, pero Luis García (exdelantero del Espanyol durante siete temporadas) falló un penalti en el minuto 87, volaron dos puntos y tuvo que conformarse con el empate. Pero es que en la anterior jornada el futbolista del Recreativo Morcillo igualó con una pena máxima en el minuto 92 un partido que el próximo rival deportivista dominaba por 1-2. Se escaparon otros dos puntos.
El gol de Culio y Borja
Su confusión con los últimos momentos de los partidos había comenzado en la décima jornada en Riazor. Se había adelantado a doce minutos del final en una acción de estrategia, pero en la prolongación Culio estrelló espectacularmente una falta lejana en el larguero para que Borja solo tuviese que empujar a la red. Dos puntos más a la basura para los maños y, por contra, el comienzo del idilio del Dépor con los últimos minutos, en los que ha acabado por convertirse en el rey.
Poco después de aquel duelo directo, el Zaragoza se despidió al final en casa del Eibar de otro punto por el que había porfiado. Igualó dos goles de desventaja, pero en el minuto 77 Arruabarrena puso el 3-2 definitivo. Y a la jornada siguiente el Numancia se llevó los tres de La Romareda. Los locales dominaban por un gol, pero Julio Álvarez, de penalti en el 74, y, a siete del final, el excéltico Gaffoor remontaron. En total, diez puntos para cambiar toda su trayectoria de esta temporada. Justo al contrario que el Dépor, al que los nueve puntos sumados cuando las luces comenzaban a apagarse lo han guiado a porfiar por un ascenso que en mañana puede quedar un poco más cerca.