El lateral y Juan Domínguez fueron los mejores en la prueba de resistencia
20 mar 2013 . Actualizado a las 17:25 h.Series de treinta segundos de carrera y quince de pausa. Cada vez hay que cubrir más distancia en ese medio minuto, con lo que los jugadores deben ir aumentando la velocidad a lo largo del ejercicio. De eso se trata el Intermittent Fitness Test; la prueba a la que ayer se sometieron los jugadores blanquiazules y en la que Manuel Pablo demostró que a los 36 años mantiene una fenomenal condición física.
El lateral canario fue el futbolista que más aguantó junto a uno de los hombres de moda en el Dépor, el canterano Juan Domínguez. Mientras sus compañeros iban abandonando, víctimas del esfuerzo, ellos dos y Álex Bergantiños llegaban a tiempo a las zonas de descanso. El pivote defensivo acabó cediendo, mientras los otros dos se daban por vencidos pasados 16 minutos. Un notable registro en esta prueba, en la que los deportistas arrancan a 8 km/h y deben acelerar el paso a razón de 0,5 km/h en cada intervalo.
«Un ejemplo para todos»
No es la primera vez que Manuel Pablo logra buenas marcas en este test, en el que los laterales y los centrocampistas suelen ofrecer los mejores rendimientos debido al tipo de trabajo al que están acostumbrados en el campo. En anteriores temporadas, el canario ya estuvo entre los que más aguantaron, normalmente en compañía de Laure, que ayer no participó debido a su pubalgia. Lo sorprendente es que el nivel no haya bajado con los años. «Las ganas con las que trabaja y entrena todos los días son un ejemplo para todos», reconocía después Salomao, impresionado con los resultados de un compañero que «tiene muchísima motivación y anima y da muchos consejos a los más jóvenes».
Otro de los grandes referentes de la plantilla y el jugador más querido por la grada no pasó ayer por su mejor día. Valerón fue el primero en entregar la cuchara y rendirse, después de encontrar dificultades incluso para alcanzar las primeras marcas. «Buff, ha sido durísimo», comentaba el mediapunta camino del vestuario. Entre risas aseguraba que a él sí le pesan los años: «Se me está acabando la pila».
Como explicaba Salomao en rueda de prensa, los jugadores empiezan a acusar la gran exigencia de unos «entrenamientos durísimos» bajo la supervisión de Fernando Vázquez y Manuel Pombo.
Seis lesionados al margen
Al margen de los convocados por su selección (Pizzi, Silvio y Abel Aguilar) el test se lo perdieron seis jugadores lesionados: Kaká, Zé Castro, Jesús Vázquez, Laure, Insua y Camuñas.