Después de sumar cuatro puntos en dos partidos, visita como penúltimo al colista Osasuna
20 ene 2013 . Actualizado a las 06:00 h.Duelo por todo lo bajo. El Dépor, penúltimo clasificado, visita al Osasuna, colista, en un partido más de sensaciones que de resultados. En el arranque de la segunda vuelta, cuando faltan las semanas decisivas, el ganador no solo sumará tres puntos de esperanza, sino que dejará a su rival apesadumbrado y atado a una losa para el resto del campeonato.
Es el partido del miedo, el que ningún equipo quiere jugar y mucho menos perder. Los coruñeses llegan en mejor momento que su adversario. El Osasuna, que empató sin goles con el Madrid la pasada semana, no gana desde el 30 de noviembre y protagoniza la cifra más pobre de goles a favor de la categoría. Solo ha festejado catorce, pero es que anotó siete en dos partidos, contra el Levante y el Espanyol, por lo que no ha marcado gol alguno en nueve jornadas, la mitad de la primera vuelta.
Así, parece el complemento imposible de un Deportivo, que ha tenido que recoger la friolera de 40 balones de su propia portería, pero solo uno de los dos últimos encuentros. Habrá que ver si el efecto Domingos Paciência sigue vigente. El choque es todo un examen a la motivación, el compromiso y la intensidad demostrada en los dos últimos choques. Después de una victoria y un empate, los deportivistas sueñan con mejorar a partir de hoy el arranque de Liga, cuando sumaron seis puntos en las cuatro primeras jornadas. A priori, la igualada en Pamplona permitiría mantener las expectativas de que las premisas del cambio han calado en la plantilla y que la salvación sigue siendo una expectativa real.
Si el vestuario ha parecido blindado hasta ahora a los problemas financieros, pues la plantilla no cobra desde septiembre, e institucionales, con el club intervenido judicialmente y en concurso de acreedores, habrá que ver cómo han caído las dudas de Valerón acerca de su continuidad la próxima temporada. Santo y seña de esta plantilla, tampoco él parece firme cuando todo alrededor se desmorona.
Bajas en defensa
El Dépor, que sabe que su éxito pasa por cerrar a cal y canto los caminos a su propia portería, sigue con los jugadores justos en defensa. Se ha desplazado a Pamplona con los cuatro que van a ser titulares (Manuel Pablo, Aythami, Zé Castro y Silvio), así como el fabrilista Insua. No tiene más mimbres, pues están lesionados Marchena, Laure y Evaldo, quien, además, está sancionado, y Seoane no cuenta. Quizá para compensarlo, el entrenador portugués alineará de inicio al expeditivo Paulo Assunção, quien junto a un Álex Bergantiños en espléndido momento, y André Santos en esa posición de mediapunta bregador gobernarán el eje.
Los goles quedan para las carreras de Pizzi, Bruno Gama y Riki, cuyos problemas físicos en las últimas jornadas podrían propiciar el esperadísimo debut de Nelson Oliveira. Todo para continuar en racha.