Análisis | Las claves de un mal endémico Los últimos casos detectados en Galicia han desatado las alarmas sobre una enfermedad que en realidad son varias y de consecuencias diversas.
20 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.El pasado mes de noviembre la Consellería de Sanidade decidía ofrecer la vacuna contra la meningitis C a los 320.000 gallegos que tienen entre 15 y 25 años de edad. En el último año, diez personas han muerto en Galicia a causa de una enfermedad compleja cuya sola mención provoca un respingo de temor, sobre todo entre los padres de niños pequeños. Éstas son diez preguntas básicas sobre la patología. ¿Qué es? Es la inflamación de las meninges o membranas que envuelven y protegen el cerebro y la médula espinal. ¿Por qué se produce? Por la invasión de microorganismos. Los más habituales se agrupan en dos tipos: virus y bacterias. ¿Todas son graves? Los virus son la causa más frecuente, y también la más benigna, de la meningitis. A veces pasan incluso desapercibidos y no necesitan ser tratados con antibióticos. Sin embargo, las meningitis bacterianas requieren tratamiento médico inmediato, aunque son mucho menos frecuentes. ¿Cuáles son las bacterias más peligrosas? Las más temidas son: «Neisseria meningitidis» o meningococo, de la que existen varios tipos, A, B, C... Es la causa más frecuente de meningitis bacteriana en el niño. Además, es un microorganismo con capacidad no sólo para producir otras enfermedades (faringitis, neumonía...), sino para invadir la sangre y provocar la denominada sepsis meningocócica, que puede producir la muerte fulminante, en pocas horas. De ahí la importancia de acudir pronto al médico. «Haemophilus influenzae» . Es responsable de cuadros de meningitis en niños pequeños, menores de 5 años. Puede producir otro tipo de enfermedades. «Streptococcus pneumoniae» o neumococo (meningitis neumocócica). Afecta básicamente a niños de menos de dos años de vida. Como las anteriores, puede dejar secuelas (sordera, etcétera). ¿Existe vacuna para todas las meningitis? Existen para algunos tipos de bacterias. En Galicia, el calendario vacunal incluye la del meningococo C y la del Haemophilis tipo B. Existe también, aunque no sufragada por la Seguridad Social, la neumocócica. Por el contrario, no existe vacuna desarrollada para el meningococo B. ¿Cuáles son los síntomas? Puede comenzar simplemente con fiebre y no es inusual que empiece con una infección en la garganta o los oídos. El germen puede pasar de ese foco inicial a la sangre y llegar a las meninges. En el caso de las bacterianas, suele ser fiebre alta con dolor de cabeza y los médicos recomiendan estar alerta a la rigidez de nuca (no se puede doblar la cabeza y tocar el pecho con la barbilla). Además, pueden aparecer manchas de color vino tinto de cualquier tamaño y que no desaparecen al estirar la piel, y vómitos que los especialistas llaman «en escopetazo», proyectados y sin náuseas. En los niños pequeños hay que vigilar la fontanela: puede abombarse. ¿Cómo se contagia? Las bacterias meningocócicas pueden estar alojadas en la parte posterior de la nariz y en la faringe, sin provocar daños. Existe población portadora, sin estar enferma, y el riesgo real de contraer la enfermedad es muy pequeño. Cuando se transmite, es por vía aérea, es decir, por los estornudos, la tos, los besos... ¿Cómo se trata? La vírica raramente necesita tratamiento específico, a menos que se presenten complicaciones asociadas, y lo que se intenta es tratar los síntomas. La bacteriana requiere ingreso hospitalario, terapia con antibióticos por vía intravenosa y en ocasiones atención en la uci. Puede ser mortal. ¿Qué hacer si se ha estado en contacto con un enfermo? El sistema sanitario gallego establece, ante la aparición de una meningitis bacteriana, un tratamiento profiláctico a los contactos más próximos, la familia y los compañeros más cercanos de clase, sobre todo entre la población infantil. Se trata de administrar un antibiótico, generalmente Rifampicina, durante un par de días. ¿Qué quiere decir que en Galicia la meningitis es endémica? Que su presencia es constante, aunque se registren brotes epidémicos que modifican la prevalencia media. Aunque Galicia es la comunidad española en la que se registran más casos de meningitis meningocócica, la enfermedad está catalogada como de «baja endemia», ya que el número de casos se sitúa en menos de cinco por cada cien mil habitantes. Hay otras zonas de España en las que esta enfermedad también es endémica, como Castilla y León y la cornisa cantábrica. Los especialista lo relacionan con factores climáticos, como el frío y la humedad.