¡Toma, Moreno!

Beatriz Pallas ENCADENADOS

TELEVISIÓN

22 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Igual que los turistas japoneses que desfilaban por el palacio del marqués de Leguineche en la película Patrimonio nacional, los espectadores fueron convidados el lunes por Bertín Osborne a darse una vuelta por la mansión de José Luis Moreno. En la obra de Berlanga, los visitantes abonaban la tarifa simple por husmear por los rincones del palacio, pero la foto con el aristócrata en pijama y batín de seda costaba tarifa doble. «Les hace ilusión ver a un marqués en carne y hueso», concedía el personaje interpretado por el actor Luis Escobar. Bertín debió de apoquinar por los espectadores de Telecinco la entrada más cara a la casa del padre de Rockefeller y Monchito, porque este, evocando a Leguineche, se presentó ante las cámaras con un pijama muy ponible, que tanto podía pasar por guayabera veraniega como por vestimenta para entrar al quirófano.

Con ese golpe de efecto, Moreno demostró que, a pesar de que ya haya pasado el tiempo del género de variedades en el que él fue la referencia en España décadas atrás, sigue conservando el gusto por cebar la televisión y alimentar esa leyenda controvertida que existe en torno a su persona. «Hay mucha gente que no le ha ido bien conmigo», admitió ante Bertín, cuyo programa sigue demostrando que maneja los resortes para sorprender a la audiencia y sacar de los personajes a los que entrevista lo que pocos conseguirían.