No es preciso que la Nasa siga explorando el universo. Existen otros mundos y están en este. Planos paralelos capaces de convivir en el mismo espacio y tiempo sin tocarse.
El viernes, ¡menudo día para hablar de dinero!, Cuatro y La Sexta aceleraron las pulsaciones del espectador abriendo una ventana a una de esas burbujas flotantes, aquella que habitan los ricos. El espectro de la muestra fue variado. Iba desde el modelo Torrente de Julián Muñoz que exponía en La Sexta Equipo de investigación hasta la gama alta seleccionada por Callejeros. En el especial de Cuatro, titulado Ricos sin crisis, se expuso un catálogo digno de estudio antropológico. Desde niños ricos que aconsejan a los jóvenes que lo que deben hacer es independizarse a esposas complacientes que confiesan sin rubor que el señor que paga sus costosas facturas es su dueño.
Para otro estudio, este en el campo médico, daría la constatación de que una vez que te acostumbras al Moët & Chandon el champán barato produce acidez. El colofón fue ver la cara de póker de Isabel Preysler y Carmen Lomana cuando la reportera les preguntó si ellas perciben la crisis. Dijeron que sí, claro. Es la última moda.