Conductor de «Operación Momotombo», nuevo «reality» de Antena 3.
20 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Julio Salinas (Bilbao, 1962) se pone serio. Es el malo de Operación Momotombo, el nuevo reality de Antena 3 (hoy, 22.30 horas). El ex futbolista es experto en terapias de superación personal, imparte cursos de autoestima y en la tele ejerce de guía de un grupo de cinco chavales problemáticos. Se los ha llevado a una aldea de Nicaragua a construir un comedor para una escuela. Más duros que el trabajo «con pico y pala a treinta grados» son los conflictos con los adolescentes. «Más de una vez he tenido que contar hasta diez», confiesa.
-¿Cómo lo ven los chavales?
-Como el tipo que les intenta fastidiar, que les dice cosas que no quieren oír. No me han conocido como jugador, si fuera Ronaldo o Beckham, todavía... Como mucho, a alguno se le hace la cara conocida por ¡Mira quién baila!, pero para ellos no soy el famoso, sino el enemigo.
-Pues menudo papelón...
-Mi labor es tratar de que me vean como un amigo, como alguien que intenta ayudarles, no imponerles, ¿eh? Quiero que me respeten pero no a través de la autoridad.
-O sea, que no comparte lo de «la letra con sangre entra».
-Ese es un mensaje antiguo, siempre estamos con lo del bofetón a tiempo, pero eso no es respeto, eso se llama miedo. Antes se tenía miedo al padre y a mí me gustaría que mis hijos no tuvieran miedo de llevar un bofetón.
-¿Cuántas veces lo han sacado de sus casillas los chavales?
-Muchas veces he tenido que contar hasta diez porque a la media hora de conocerlos ya tuvimos una gran bronca.
-¿Asusta cómo son hoy en día los adolescentes?
-Sí, muchos no tienen ilusión por nada, tratan mal a sus padres, solo se preocupan por ponerse guapos y salir de fiesta. Les falta motivación y confianza.
-Usted encontró refugio en el fútbol.
-Soy un chico de barrio y vengo de una familia humilde... A mí el fútbol me enganchó y sacrifiqué mucho, porque a los 16 años lo que quieres es salir a ligar.