Subasta de una joya del rock

Nada Weigelt NUEVA YORK

TELEVISIÓN

Un coleccionista vende en Internet la maqueta original del «disco de la banana», de The Velvet Underground, que compró por 75 centavos. La puja llega ya a los 150.000 dólares

08 dic 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

Es una historia que parece salida de la época de los buscadores de oro. En septiembre del 2002, el coleccionista de discos Warren Hill, de Montreal, Canadá, revisa en el barrio de Chelsea, en Nueva York, una caja con discos baratos, dañados por el agua. Compra tres piezas por 75 centavos cada una, entre ellas, un LP negro de acetato. Sobre la pegatina de color cobre se lee «Velvet Underground» y la fecha, 25 de abril de 1966. El disco aparentemente insignificante resultó ser una verdadera joya. Actualmente se ofrece en la casa de subastas en Internet eBay y tiene todas las posibilidades de convertirse en el más caro de la historia. La tarde del jueves la oferta más alta era ya de 150.000 dólares tras un modesto comienzo con 99 centavos el 28 de noviembre. Esta madrugada vence el plazo y la experiencia demuestra que en las últimas horas la puja se vuelve más intensa. Según los vendedores, el disco es quizá la pieza más valiosa de la historia del rock y del pop. Se trata de la versión original de la maqueta, desaparecida durante años, del legendario disco The Velvet Underground & Nico , que salió al mercado en 1967 a instancias de Andy Warhol, y que contiene versiones distintas y tomas alternativas de los legendarios temas. El disco, con su mezcla de oscuras baladas y experimentos sonoros radicales, se convirtió en un clásico del rock. En 1967 salió al mercado tras un largo proceso. La limitada edición original se presenta con una serigrafía de Warhol con una banana para pelar, que, con su vida interior de color rosa, presentaba una referencia difícil de no entender. El «disco de la banana» sigue siendo uno de los más codiciados por los coleccionistas, pero, tomando en cuenta la actual subasta, se puede adquirir por precios irrisorios. Desde hace años, circulaban rumores en el mundo de la música sobre una maqueta original, pero durante 35 años ésta permaneció desaparecida. Sólo tras realizar su compra, Warren Hill y su amigo Eric Isaacson, descubrieron toda la historia, en compañía de un vendedor de discos de Portland, estado norteamericano de Oregón.