Considera que la Audiencia no argumentó la desestimación de la denuncia por apropiación Según la decisión, Carmen Formoso se encontraba en situación de «indefensión»
04 jul 2006 . Actualizado a las 07:00 h.?a novela de Cela La cruz de San Andrés volverá a pasar por los tribunales. Este texto, por el que fue acusado de plagio y con el ganó el Premio Planeta en 1994, tiene parecidos argumentales con la obra de Carmen Formoso, Carmen, Carmela, Carmiña. Tras ser desestimada en varias ocasiones la acusación de plagio, el Tribunal Constitucional ha aceptado la indefensión alegada por la acusación y considera que los tribunales deben volver a estudiar el caso. Según la decisión, la Audiencia de Barcelona deberá volver a revisar las diligencias previas para estudiar si acepta o no la acusación de apropiación indebida formulada en su día por la demandante, y no tenida en cuenta. Según el Constitucional, en el 2001 Formoso presentó una denuncia por dos motivos, contra la propiedad intelectual, por un lado, y por apropiación indebida, por otro. El segundo de ellos fue descartado por la audiencia provincial barcelonesa tras el recurso interpuesto por la editorial Planeta y dejando abierto sólo el camino del litigio por la demanda contra la propiedad intelectual. En la mañana de ayer, la sala primera del Tribunal Constitucional ha decidido concederle amparo a las peticiones de la escritora y, por lo tanto, los tribunales deberán volver a considerar la denuncia por apropiación indebida descartada en su día por el juzgado barcelonés. Para el Constitucional, los derechos de Carmen Formoso no fueron respetados, al descartarse sin argumentación el segundo de los motivos por los que la escritora denunciaba al escritor. A pesar de que la denunciante alegó indefensión dos veces, la «Audiencia de Barcelona se limitó a indicar, hasta en dos ocasiones, que la cuestión había sido resuelta, sin tomar en cuenta ni resolver, por tanto, sobre la indefensión padecida por la querellante». En otro sentido, el Tribunal Constitucional asegura que las resoluciones recurridas «no otorgaron respuesta a las cuestiones planteadas» por la denunciante e «incurrieron en incongruencia omisiva al no responder a sus reiteradas quejas». De este modo, los juzgados barceloneses en los que se vio la causa deberán reestudiar la demanda presentada por Formoso, quien recibió ayer la decisión «esperanzada» e indicó con cierta amargura que su lucha judicial se había «alargado tanto» que ya pensaba que no le darían la razón «hasta que estuviera muerta». «Casi no me la puedo creer», dijo en alusión a la noticia. Marina Castaño, la viuda de Camilo José Cela, prefirió no hacer declaraciones sobre esta decisión del tribunal que, en la práctica, significa la reapertura de una polémica que acompañó al premio Nobel durante los últimos años.