Extremas medidas de seguridad en la ceremonia por la guerra

La Voz

TELEVISIÓN

17 mar 2003 . Actualizado a las 06:00 h.

La seguridad será la principal protagonista de la 75 edición de los Oscar, festejo que, a falta de menos de una semana para su celebración, quiere proteger de todo riesgo a la mayor concentración anual de estrellas de Hollywood. Ante lo que parece una inminente guerra contra Iraq, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas ha puesto en manos del recién creado departamento de seguridad del Estado de la policía de Los Ángeles la coordinación logística de este festejo. «No puedo ni imaginarme un acto más seguro que lo que ya es», subrayó a la prensa John Pavlik como encargado de comunicación del departamento. Son palabras corroboradas por el productor del acto, Gil Cates, dispuesto a asistir el próximo domingo a la ceremonia con su familia, como muestra de la confianza que tiene en la seguridad del acto y para disuadir a las estrellas que estén pensando en ausentarse. Sin embargo, la Academia no quiere correr riesgo alguno y ha reforzado su vigilancia sobre la ya establecida el pasado año en el teatro Kodak de Los Ángeles, sede de esta velada. Acto ensombrecido Si la 74 edición de los Oscar tuvo que superar los temores de organizadores e invitados tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, en esta edición la posibilidad de una guerra es la que ensombrece el acto. Fuentes de la Academia han confirmado que habrá más de setecientos guardias de seguridad trabajando conjuntamente con la policía de Los Ángeles, fuerzas especiales de este mismo cuerpo, bomberos y la patrulla de carretera, así como agentes del FBI. Como aclaró la portavoz de la policía federal, Laura Bosley, es un despliegue habitual en los últimos años, aunque este año hay nuevas y secretas medidas de seguridad. Habrá un mayor número de detectores de metales y controles dentro del recinto y se cerrará un área urbana aún más amplia alrededor del teatro, de acceso muy limitado. Esta última medida, que entró en vigor ayer, quiere proteger el paso de las estrellas por la alfombra roja y evitar la presencia de manifestantes, de una u otra tendencia, aprovechando la popularidad del acto. Evitar a los manifestantes «Al parecer, unos 2.000 manifestantes están dispuestos a hacerse oír, pero no será en los alrededores del teatro», puntualizó el capitán de la policía Mike Downing en referencia a una manifestación de protesta convocada para ese día unas calles más abajo. Allí también está convocada una concentración en apoyo a la política del presidente George Bush, pero Downing recalcó que la consigna para el domingo «es que la velada sea extremadamente segura». A pesar de todas estas garantías, el efecto de la guerra contra Irak se está dejando sentir incluso antes de su comienzo. Estas bodas de diamante del Oscar tenían prevista por primera vez en quince años la presencia del modisto Giorgio Armani, encargado de vestir cada año a algunos de los nombres más destacados de la industria, como Jodie Foster, Michelle Pfeiffer, Robert De Niro, Meryl Streep, George Clooney y Benicio del Toro, entre otros. Sin embargo, el diseñador italiano ha sido el primero en aplazar su viaje, cancelando de paso una de las festividades previas al Oscar. Además, aún está en el aire la celebración, el jueves, de una fiesta con Sharon Stone como anfitriona, en honor al 75 aniversario del Oscar. Otros estudios, como DreamWorks, Sony y Focus Features, no tienen planes de celebración a pesar de haber producido varios de los candidatos en esta edición, como , y , respectivamente. Un invitado de honor que sí ha confirmado su presencia es el español Pedro Almodóvar, candidato al Oscar como mejor director y mejor guión original gracias a la película y que hoy viaja a Los Angeles para participar en estos actos, donde le acompañarán sus actores principales, Javier Cámara y Leonor Watling. No estará sólo, porque incluso en este ambiente de preocupación, otros actos como la gala de Elton John en favor de la lucha contra el sida o las fiestas de la revista Vanity Fair y de Miramax siguen tan firmes en el calendario de Hollywood como la propia celebración de los Oscar, fieles al espíritu de que . EFE ra/mla/hma |K:CUL:CULTURA-ESPECTACULOS,CINE| |N:C| 03/17/19-29/03