«Entre Javier Sardá y yo hay buena química»

Mercedes Rodríguez MADRID

TELEVISIÓN

La malagueña, única chica del equipo fijo de «Crónicas marcianas», asegura que el buen ambiente que reina en el plató es una de las claves del éxito del programa

04 mar 2003 . Actualizado a las 06:00 h.

Es la única mujer del equipo diario de Crónicas marcianas y ha llevado al programa de Telecinco la chispa del sur. Esta malagueña de 24 años quería ser actriz y empezó a buscarse la vida muy pronto fuera de casa hasta que llegó al canal de Operación Triunfo . Atractiva y sexy, sabe coquetear con la cámara y, ante su guiño, parecer dejar rendido al propio Sardá. -De «Operación Triunfo» a «Crónicas marcianas». ¿Cómo lo consiguió? -Yo llevo preparándome desde los 18 años que me fui a Madrid a estudiar arte dramático. En Málaga estuve trabajando en un canal local durante varios años y desde allí mande mi currículum para el canal de OT. Nos presentamos 15.000 personas para este puesto. Y después me llamó Sardá. Fue suerte y casualidad. -En pantalla parece muy alegre y optimista... -Sí. Me considero una persona normal. Cuando tengo un problema, soy muy práctica, si tiene una solución voy rápidamente a por ella. -¿La belleza es un arma? -Por qué no. El físico forma parte de la persona pero puede convertirse en un arma de doble filo porque también tienes que demostrar que hay algo más. Lo de guapa y tonta es un tópico que está pasado de moda. -¿Es coqueta? -Sí, la coquetería forma parte de la mujer. Me gusta serlo y disfruto con ello. -¿Con Sardá no hay un guiño de coquetería? -Bueno, sí, pero más que coquetería es feeling . Cuando hay compenetración y buena química, eso se ve. ¿Atracción? No, forma parte del rol que tenemos y de la sintonía. En el programa somos como una familia. -¿Cómo se desenvuelve entre tantos hombres? -Tiene sus pros y sus contras. Soy la única chica, me miman, pero tengo que aguantar que si la pequita en el pecho... Toda esa carga sexual.