Salman Rushdie, escritor que publica su nueva novela «Furia» El 11 de septiembre de 2001 ¿Les suena? Era la fecha oficial de publicación de «Furia», un libro en cuya portada una nube negra se cierne amenazadora sobre el Empire State. Por si fuera poco, el autor es Salman Rushdie, un escritor que parece condenado a encontrarse con la vertiente más insoportable del fundamentalismo islámico. No hace mucho, vivía custodiado ante la pena de muerte decretada por el régimen iraní, que juzgó blasfemo el contenido de «Los versos satánicos». Pero eso es pasado. Anteayer, en Madrid, bromeaba sobre lo premonitorio de su última novela: «Os aseguro que no lo supe a través de mis conexiones con Al Qaeda».
14 jun 2002 . Actualizado a las 07:00 h.Ya no mira a ambos lados cuando sale de casa. Salman Rushdie (Bombay, 1947) vive en Manhattan, ha dejado de llevar escolta, aparece por los saraos culturales y en las páginas del corazón por su relación con la modelo y actriz Padma Lakshmi. Ahora promociona en Madrid su novela, Furia (Plaza y Janés), un retrato urbano que fusiona géneros literarios y en el que cabe desde la crítica a los medios de comunicación hasta las andanzas de un asesino. ¿«Furia» contiene varios pasajes casi premonitorios del 11-S. ¿Realmente creía que podía ocurrir algo así? ¿No esperaba que ocurriera una catástrofe física como la que se produjo. Pero tenía la sensación de que llegábamos a un final. Se había alcanzado una cumbre de éxito, de dinero. Estaba todo inflado, y pensé: «Esto no puede durar». Además, había indicios: la burbuja de Internet había explotado; la economía iniciara una cuesta abajo... Cuando se está en la cumbre, sólo se puede bajar. ¿Y sus intuiciones se plasmaron en este libro... ¿Sí. ¿Sabes? A veces los libros son más inteligentes que los escritores. ¿Como conocedor del mundo islámico, ¿coincide con quienes predicen un gran choque de civilizaciones? ¿No estoy de acuerdo con la idea del choque de civilizaciones porque presupone que las culturas son monolíticas. Hay divisiones muy grandes dentro de Occidente, igual que las hay en el mundo islámico: los iraníes odian a los afganos; los irakíes odian a los iraníes; los saudíes odian a los irakíes... ¿¿Ve viable una movilización de todos esos países? ¿El mayor error de Bin Laden fue que creyó que tras los ataques se produciría una gran yihad (guerra santa). Pero no la hubo. En la época del marxismo se hablaba de una internacional socialista; y ahora, de algo parecido en la civilización islámica. Pero la internacional islámica no existe.