Un infierno llamado Somalia

La Voz

TELEVISIÓN

SYDNEY BALDWIN

El fervor patriótico de Estados Unidos ha recibido bien la historia de una de las peores derrotas de su ejército Nominada a cuatro Oscar, entre ellos el de mejor director para Ridley Scott, y aupada al número uno de la taquilla de Estados Unidos y Canadá pese a recrear uno de los hechos más dolorosos en la historia militar norteamericana, «Black Hawk derribado» es la crónica en clave formal muy próxima al documental (Scott utilizó preferentemente la cámara en mano) de la segunda derrota del ejército norteamericano tras la guerra del Vietnam: la conocida como Batalla de Mogadishu, acontecida el 3 de octubre de 1993.

21 feb 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

La misión relámpago del ejército estadounidense consistía en el envío de ciento cincuenta rangers para capturar a dos lugartenientes del señor de la guerra, el general Mohamed Harrah Aidid. La duración que se estimaba a la escaramuza no superaba los treinta minutos. Sin embargo, la refriega duró 18 horas y en ella se perdieron dos sofisticados helicópteros Black Hawk, murieron 18 rangers y 73 más resultaron heridos. En el bando somalí, se calcula que los fallecidos fueron un millar... Filmada por Ridley Scott en exteriores marroquíes entre los meses de marzo y julio del año pasado, para la producción contaron con la absoluta colaboración del ejército norteamericano que puso a disposición del productor Jerry Bruckheimer (Pearl Harbor) varios impresionantes helicópteros Black Hawk. Previamente hubieron de obtener la autorización expresa del monarca alauita para que entraran en el país. Aunque el proyecto no guarda relación alguna con los atentados del 11 de septiembre pasado, su extraordinaria acogida en las pantallas grandes norteamericanas, a juicio de los sociólogos guarda una estrecha relación con el fervor patriótico que barre el país de George Bush. Scott ha procurado distanciarse lo suficiente para recrear los hechos con absoluta objetividad. Para conformar el reparto, logró reunir a varios de los rostros más rocosos de Hollywood (entre ellos los de San Shepard o Tom Sizemore), aunque el protagonismo absoluto es para el joven Josh Hartnett, convertido en estrella a partir de esta película. Del papel de prensa a la pantalla El origen del guión está en los 29 episodios que Mark Bowden publicó a partir del 16 de noviembre de 1997 en las páginas del diario Philadelphia Enquirer, en los que recrea en clave reportaje y con absoluto verismo, los detalles de la conocida como Operación Irene. Más tarde tomaría cuerpo de libro, logrando convertirse en un best-seller con el título La batalla de Mogadishu, que atrapó a Scott desde el primer momento por el detalle preciso de su narración, minuto a minuto, muerto a muerto... Fue también una batalla que llegó inmediatamente a la televisión, impactando a los telespectadores que no podían imaginarse cómo una misión de paz de su ejército podía acabar en una tragedia. Las imágenes del cuerpo mutilado del oficial Bill Cleveland, arrastrado por una multitud enfurecida, ya pertenecen al dramático imaginario colectivo estadounidense.