Asesorías de A Mariña: «Non damos abasto tramitando ERTEs»

l. rey / m. cuadrado / j. alonso VIVEIRO | FOZ | RIBADEO / LA VOZ

SOCIEDAD

«É unha avalancha, centos; e cando remate esto serán as liñas de axudas», señalan

21 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Asesorías de A Mariña trabajan estos días a destajo, en algunos casos a través del teletrabajo, tramitando telemáticamente ERTEs (expedientes de regulación temporal de empleo) de decenas y decenas de pequeñas y medianas empresas de la comarca cuya actividad se ha visto paralizada como consecuencia de la crisis sanitaria del coronavirus. La mayoría pertenecen por ahora al comercio y a la hostelería, pero en un futuro más o menos próximo podrían adoptar la medida negocios de otros sectores que, pese a tener autorización para continuar operativos con algunas restricciones a la hora de atender al público, pueden acusar la falta de suministro. Podría ser el caso, por ejemplo, de algunos talleres de vehículos que no dispondrán de material. Sargadelos también tramitó un ERTE, que afectó a 20 trabajadores.

Con todo, la situación derivada del COVID-19 es tan cambiante que casi a diario el BOE publica modificaciones relacionadas con el Real Decreto que aprobó el estado de alarma, como apuntó este viernes el gerente de Viveiro Asesores, David Gómez Rosa. Uno de esos cambios es que ahora mismo todos los autónomos, cesen o no la actividad, tendrán derecho a percibir una ayuda de 70 % de la base reguladora, que hay que justificar y solicitar.

Además, el Estado pagará a los trabajadores afectados por un ERTE el 70 % de su base de cotización, como si estuvieran en el paro, pero dejando su «contador de paro a cero». Es decir, si en el futuro los despiden, tendrán derecho a cobrar la prestación al completo. Gómez Rosa también explicó que las empresas que se acojan a estos ERTEs, una vez recuperen la actividad superada la crisis sanitaria, deberán garantizar el empleo de todos sus trabajadores durante al menos seis meses.

En la gestoría López Braña, de Ribadeo, explicaron que «todas las empresas que tenemos de cierto volumen se acogieron al ERTE. De hostelería todas, y de otras que no estaban obligadas al cierre, al sufrir una bajada del 70 % en sus ingresos, también estamos tramitando las bajas por causas objetivas».

Al este volumen de trabajo se suma el inicio de las solicitudes de bajas también de autónomos por descenso de actividad, cuando hasta ahora solo se podía hacer por cierre. «Están haciendo modificaciones y nos tenemos que adaptar continuamente, por ejemplo, ahora con las órdenes de cierre también para los alojamientos turísticos». El trabajo lo realizan en López Braña desde la oficina y por el sistema de teletrabajo. En el primer caso, solo se atienden a clientes previa cita y tomando las oportunas medidas de seguridad.

Desde Gesfisco, en Barreiros, apuntan: «Estamos a tope de ERTEs e subsidios de autónomos, pero sobre todo ERTEs de forza maior. É unha avalancha, non damos abasto atendendo chamadas de xente que pregunta que pode facer, pero estamos aí para o que necesiten. E unha vez solicitados os ERTEs, a xente vai ter que buscar financiamento coas novas liñas de axuda do ICO, que esperemos que saian a finais da semana que vén».

«E para o mes que vén empezará o trimestre da declaración do IVA, que non suspenderon, aínda que deron facilidades para aprazar impostos, pero hai que facer a declaración en tempo e forma», añadieron. «Isto está sendo un terremoto. Non sabemos que vai saír de aquí, pero temos medo a que moitas das empresas que están paradas non podan reanudar a actividade», concluyeron. Ayer el número de ERTEs en Galicia pasaba de 4.200.

Unas empresas tienen clara la tramitación del expediente por causa de fuerza mayor, pero otras no

La tramitación de ERTEs se suma a la actividad ordinaria que las gestorías deben seguir realizando pese a lo extraordinario de la situación. También en 3A Consultores de Burela han visto incrementada su actividad por el notable número de ERTEs que deben presentar. Para unas empresas se presenta más clara la tramitación del mismo amparándose en la causa de fuerza mayor recogida en los decretos y resoluciones del Gobierno central y autonómico, «pero noutros casos non está tan clara e existen dúbidas». Hay cierres de negocios obligados, pero hay otras empresas que dependían de esos primeros negocios y que al reducírsele su actividad se han visto abocadas de rebote a cerrar. Un efecto colateral sería el caso de una empresa de distribución de bebidas que surte a un bar al que le han obligado a cerrar por las medidas extraordinarias por el COVID-19. La tramitación de ambos expedientes es diferente.