El magistrado del primer juicio por la custodia de un perro en España pide más informes antes de tomar una decisión y el animal seguirá con el hombre, acusado de hurto por su ex
19 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.España ha celebrado su primer juicio sobre la custodia de una mascota. Los tribunales tenían que decidir con quién debería vivir Leben, un dogo de Burdeos de siete años, tras el divorcio de sus amos. El pleito, que se ha celebrado en el Juzgado de Falset (Tarragona) es el primero en el país desde que se aprobó la ley que permite modificar el Código Civil para que los animales pasen de ser considerados «bienes muebles» a ser «seres vivos dotados de sensibilidad». Por ahora Leben tendrá que esperar, al igual que sus dueños. Y es que el juez encargado de dirimir este litigio ha alegado un «vacío legal» en la legislación animal y se ha mostrado dispuesto a requerir al poder legislativo que lo corrija, por lo que suspendido la vista.
Perros y gatos eran considerados un «bien mueble» más que podía ser embargado. Pero los tiempos cambian y el régimen jurídico también. Así que el Congreso abrió a finales de año una frontera moral al admitir a trámite una proposición de ley- a propuesta del PP, y con el unanimidad del resto del hemiciclo para eliminar la cosificación jurídica de los animales y que estos, como «seres vivos dotados de sensibilidad», sean considerados sujetos de derecho. El cambio implicará que tras un divorcio se haga una asignación de custodia en la que prime el bienestar del animal, «pudiendo preverse el reparto de los tiempos de disfrute si fuere necesario».
La historia de «Leben»
La historia de Leben con sus propietarios se remonta al 2014, cuando Jonas Amadeo Lucas y su exmujer acababan de abrir El Hogar, un centro de recuperación de animales. Este perro fue rescatado de malos tratos en Madrid (incluso fue utilizado en peleas ilegales). «Desde el primer momento vivió conmigo», explica al Diari de Tarragona Jonas. Hace dos años que ambos decidieron separarse a nivel sentimental y profesional. El hombre se fue a vivir a Andalucía y se llevó consigo a Leben. «Ella dice que el perro es suyo porque es su propietaria, al igual que todos los animales de El Hogar, pero nunca ha estado con ella. No está a mi nombre, pero Leben nunca se ha separado de mí y voy a luchar por su custodia. Ella alega que el dogo es de su propiedad, pero yo alego que es mi familia», explica Jonas Amaedo Lucas al citado diario. El denunciado ha apelado durante el juicio a la reciente reforma del Código Civil español. El abogado de la denunciante, Pablo Barreneche, considera que el caso corresponde a un delito leve «de hurto»: «Estamos hablando de un extrabajador que se ha llevado un perro que no estaba a su nombre. Podríamos hablar sobre el concepto patrimonial de los animales, pero la realidad es que nos tenemos que guiar por las leyes que existen hoy».