El Tribunal Superior de Asturias dice que ir tres días borracho a trabajar no es motivo de despido

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

MARCOS CREO

No solo obliga a readmitirlo, también a abonar todo el sueldo que dejó de percibir desde que fue despedido en junio del 2016

24 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Presentarse a trabajar borracho durante tres días no es motivo de despido. Al menos es lo que entiende el juzgado de lo Social y el Tribunal Superior de Justicia de Asturias que han obligado a una sidrería de Gijón a readmitir a un camarero que acudió a su puesto de trabajo bajo los efectos del alcohol. Y no lo hizo solo una vez. Fueron tres. De nada le valió al dueño haberle suspendido durante tres días de empleo y sueldo durante las dos primeras porque el hombre volvió a caer. Fue justo a la tercera, la vencida, cuando el dueño del local le entregó una carta de despido en la que indicaba, como publicó El Comercio, que no tenía intención de corregir su comportamiento, porque ya le habían llamado al orden otras dos veces.

La justicia entiende que el despido resulta improcedente porque artículo del convenio de hostelería al que hace referencia la carta presentada por el hostelero habla de que el incumplimiento contractual es entendido cuando la embriaguez repercute en el trabajo, algo que no aparece especificado. El Supremo no solo obliga a readmitirlo, también a abonar todo el sueldo que dejó de percibir desde que fue despedido en junio del 2016.