Francisco Polo es pura vitalidad y tiene un discurso rápido e impecable. Tiene clarísimo dónde reside el verdadero poder y está más que orgulloso de conseguir, cada día, devolvérselo a sus auténticos protagonistas.
-Parece que la gente empieza a creer que tiene capacidad para cambiar las cosas...
-No lo cree, lo sabe. Nosotros medimos el impacto de lo que hacemos, tiene resultados. Hay 45 millones de personas en todo el mundo que saben lo que es cambiar las cosas, de las que 1,6 son españoles.
-¿Cómo es el comportamiento de los españoles en el conjunto de la entidad internacional?
-En España nos movemos mucho más que en otros países, lo digo con los datos en la mano: tenemos la mayor proporción de usuarios de Change.org de entre los internautas, un 17 % [en Galicia es del 23 %].
-¿Por qué ocurre esto?
-Creo que los políticos y las empresas están muy lejos de la gente y Change.org ocupa ese espacio de altavoz para la ciudadanía.
-¿De qué vive Change.org?
-Ayudamos a promocionar a algunas organizaciones. Por ejemplo, si Greenpeace quiere que una campaña suya tenga más eco, le ponemos en contacto con los usuarios, que pueden recibir, si quieren, claro, más información.
-¿Cuál es su siguiente paso?
-El camino contrario al actual: que los que resuelven problemas tengan un perfil en Change.org para recibir las peticiones y contestar directamente. Seremos altavoz y auricular.