Las cifras de fallecidos y nuevos infectados son las más bajas en diez años
19 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.La lucha contra el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) vive sus momentos más esperanzadores. Un informe presentado por Onusida ayer en Washington, en vísperas de la XIX Conferencia Internacional sobre el Sida, presenta las mejores cifras de los últimos años.
Aunque los afectados por el virus son cerca de 34 millones en todo el mundo, el número de personas con acceso a tratamiento médico aumentó un 20 % en los últimos diez años, lo que se traduce en un total de 8 millones de personas en el 2011. Esto supone un aumento de un millón y medio de personas. En el caso de las nuevas infecciones en niños, desde el año 2009 dismunuyeron en un 24 %, hasta una estimación de 330.000 menores infectados en el 2011. Este número contrasta favorablemente con los 570.000 nuevos infectados del 2003. La cifra de fallecidos por enfermedades relacionadas con el virus también sufrieron un gran descenso. En total fueron cerca de 1,7 millones de personas, la tasa más baja de la última década.
Esta mejora en torno al VIH se debe a la lucha que los países afectados llevan a cabo para erradicar la enfermedad entre su población. Un total de más de 80 países de todo el mundo aumentaron los gastos nacionales dedicados al sida en un 50 % desde el 2006. La región donde más se ha notado este incremento es la del África subsahariana, con una subida de un 97 % en los últimos cinco años. Los llamados países BRIC (Brasil, Rusia, India y China) incrementaron este gasto en más de un 120 %. En China o India, supone un 80 % de los recursos contra el virus que, en países como Brasil o Rusia ya es del 100 %.
En palabras del director ejecutivo de Onusida, Michael Sidibé, «los países más afectados están demostrando su liderazgo en la disputa del VIH, pero hay que luchar si queremos cumplir los objetivos del 2015». La ONU pretende que dentro de tres años no haya ninguna nueva infección ni ninguna muerte relacionada con el sida. Sidibé afirmó que «cada dólar gastado en el sida es una inversión» y recalcó que «la prevención del VIH y su tratamiento es necesario para todos». El coordinador global del sida, Eric Goosby, apuntó que «debemos aprovechar este progreso para lograr construir una generación libre de sida».