Un pirata informático se cuela en el smartphone de Scarlett Johansson, roba unas fotos en las que la actriz, supuestamente, se retrata desnuda mediante su propio móvil, y las cuelga en Internet. En las imágenes se ve a Scarlett mientras se fotografía ante el espejo del baño y sobre la cama para enseñar el trasero y un seno.
Esta actuación sin duda será recordada por la estrella de Hollywood como la peor interpretación de su carrera, y probablemente como la mejor por los millones de fans en todo el mundo que ayer colapsaron las redes sociales para jalear el desnudo de la Johansson. Ni los tecnócratas del FBI pudieron sustraerse al morbo. La investigación ya está en marcha al apreciarse indicios de delito.
Nadie ha confirmado si las fotos son reales o un montaje, pero la determinación con que ha actuado la policía casi garantiza lo primero: la propia Scarlett se habría fotografiado como Dios la trajo al mundo y algún espabilado le birló la exclusiva.
Pero el asunto no acaba en el exhibicionismo de la Johansson. «El FBI está investigando a personas o grupos responsables de una serie de ciberintrusiones a importantes figuras públicas», confirmó a E! News Laura Eimiller, portavoz del FBI.
Según el portal TMZ.com, el mismo hacker que ha sacado a la luz las curvas de Scarlett ha robado también fotos comprometedoras del móvil de Mila Kunis. Algunas son imágenes suyas, y otras, del actor Justin Timberlake, que aparece «sobre la cama, sin camisa y con unas bragas rosas en la cabeza». Todo esto confirmaría una relación íntima que ambos intérpretes llevan tiempo negando.