¿Por qué no creció Tintín?

La Voz

SOCIEDAD

08 dic 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

Si son ustedes lectores de las aventuras de Tintín, tal vez se hayan preguntado en alguna ocasión cómo es posible que el personaje de Hergé se halla pasado 75 años con el mismo aspecto: la misma estatura, el mismo rostro en el que nunca nace la barba, las mismas andanzas en las que nunca parece sentir impulsos sexuales, el mismo flequillo en el que nunca se aprecia una cana... Sospechoso, ¿no? Lo normal es pensar que el autor nunca quiso hacer envejecer a su personaje. Pero no todo el mundo se conforma con lo normal. Así que un médico canadiense, de nombre Claude Cyr , acaba de publicar un sesudo estudio en el que desvela el misterio. Para demostrar lo serio del estudio, este doctor lo tituló «Deficiencia adquirida de la hormona de crecimiento e hipogonadismo hipogonadotrópico en un individuo que sufrió varios traumatismos en la cabeza». Casi nada. El asunto es que este médico se ha dedicado a estudiar las andanzas de Tintín y ha concluido que el héroe del cómic ha sufrido (que se sepa) más de 50 pérdidas del conocimiento, 43 de ellas por golpes en la cabeza; tres heridas de bala, tres envenenamientos por cloroformo, cuatro explosiones, tres accidentes de coche y dos caídas. Por si fuera poco, el médico interpretó la gravedad de los golpes por el número de estrellas que giran alrededor de la cabeza de Tintín después de cada golpe. El caso es que, con tanto accidente y a tan tierna edad, los testículos de Tintín dejaron de funcionar adecuadamente y de ahí todas esas disfunciones que lo han dejado para la historia como un eterno adolescente. El artículo ha sido publicado en el último número de la revista de la Asociación de Medicina de Canadá. La segunda foto del día es para Phil , la famosa marmota que pasó a la historia en aquella divertidísima película titulada Atrapado en el tiempo en la que Bill Murray revivía el mismo día una y otra vez. Resulta que Phil ha cruzado fronteras y ha viajado hasta Washington para defender las subvenciones que anualmente recibe el museo local sobre el clima. Con el éxito de la película, la marmota se ha convertido en el mejor valedor de su ciudad. Y acabamos con una historia de amor, la protagonizada por Graham Thompson y Laura Alexander . Ambos están compitiendo, en barcos diferentes, en la regata Global Challenge , que consiste en dar la vuelta al mundo. En pleno paso por el Cabo de Hornos, a Graham no se le ocurrió mejor idea que utilizar la radio para pedir matrimonio a Laura. El hombre lo tenía todo previsto porque, en una escala previa efectuada en Argentina, había comprado un anillo que dejó en manos de un compañero de Laura. Éste, atento a la jugada, se lo entregó tras la insólita petición. Lo que todavía no se ha podido saber es la respuesta de Laura. Pero, francamente, ¿creen ustedes que se puede rechazar una petición de boda tan romántica?