La foto del día es para que no se olviden de que David Duchovny está vivo. Y tan guapo como siempre. No me digan que ya se habían olvidado del agente Mulder de Expediente X . Después de luchar a brazo partido contra fantasmas, extraterrestres y otras hierbas esotéricas, Duchovny regresa con una película que él mismo dirige y protagoniza. Se títula (al menos en inglés) House of D y fue presentada ayer en el festival neoyorkino de Tribeca, apadrinado por el gran De Niro , aunque el verdadero padrino de Duchovny ha sido Robin Williams , que participa en la película y que muestra de esta forma tan gráfica su cariño hacia el ex agente del FBI. Todo un icono de los 90 Ahora que para icono y no cualquier icono, Raphael . El melenudo y veterano cantante se considera patrimonio cultural de España. Lo ha dicho él mismo a un diario chileno: «Es difícil encontrar una casa en España sin un disco mío», declaró. Y me ha hecho pensar si no tendré que ir inmediatamente hoy a algún centro comercial de guardia a ver si tienen una copia del Tamborilero o algo por el estilo, no vaya a ser que hagan una encuesta y decidan retirar el título de patrimonio cultural al pobre Raphael por mi culpa. Y es que el hombre estaba que se salía. Le contó al periodista chileno que su música era más popular en Rusia que la de Frank Sinatra. Y se quedó tan ancho. Es-can-da-ló. Menos mal que estaba en Chile, sino habría pensado que el bueno de Raphael era uno de los participantes en la marcha del millón de porros que ayer se celebró en Madrid convocada por varios colectivos antiprohibicionistas, que le piden a Zapatero que no se ponga duro con el tema del cánnabis. Bueno, más que no se ponga duro, que se ponga blando y lo legalice, permitiendo también el autocultivo. Como ven en la imagen, los participantes hicieron gala de sus reclamaciones y, aunque probablemente no se llegaron a confeccionar el millón de porros del eslógan, parece ser que se hicieron muchos y algunos dignos de auténticos ingenieros del canuto , porque debe llevar su tiempo elaborar un cigarrillo de la risa del tamaño que luce el activista de la fotografía. Hay que suponer que lo compartiría con sus compañeros ya que, si se lo fumó él solito, mucho me temo que acabaría algo mareado. Sea como fuere, no hubo ningún incidente entre los manifestantes y, lógicamente, cuentan los cronistas que la marcha discurrió en una ambiente «lúdico y festivo». La pareja real danesa, a golpe de rock Ya saben que, una semana antes de que don Felipe y su prometida se den el sí, lo harán en Dinamarca el príncipe Federico y la australiana Mary Donaldson . Pues ayer, siete días antes del gran enlace, se celebró en Copenhague un superconcierto al que acudieron más de 40.000 personas, entre las que se encontraban los prometidos y otras personalidades como el mismísimo primer ministro danés Anders Fogh . Y no crean que el cartel rebosaba de artistas internacionales. La práctica totalidad de los músicos eran daneses, aunque también acudió algún foráneo como el cantante de Suede, Brett Anderson . El concierto duró cuatro horas y digo yo que se habría podido organizar en Madrid algo así para bajarle un poco el tono rancio que está cogiendo la boda, ¿no creen? Porque la verdad es que, con lo que vamos sabiendo, bien podría tratarse de una boda casi medieval. En fin, que las cosas no cambian tan deprisa.