Ya saben que ahora se lleva ejercer la profesión del marido, como Ana Botella o Hillary (ya lo dice El Jueves , «todos encontraríamos normalísimo que nos operase la mujer del cirujano») y esta foto es el botón de muestra: Ingrid es la señora de la toga brillante, los guantes de fregar y la corona (¿el pelucón es suyo?) que está inaugurando un mercadillo en un centro comercial de Chicago. ¿Por ser una celebridad local? ¿Acaso una modelo famosa? No, no le hace falta, ella es la mujer de Horst Foerther (el que la mira protector), alcalde de Nuremberg, ciudad de donde se copió el citado mercadillo. ¿No es fantástico? Yo creo que los gallegos no debemos quedarnos atrás en esta creciente moda. Así que desde aquí animo a Carmen de la Iglesia de Vázquez (Paco), Ada Arroyo de Cabezas (Manuel) y compañía a lanzarse a la arena pública. Podían empezar cortando cintas para inaugurar playas recién lavadas o cosas así... Sólo espero que si Corina Porro y Manolita López Besteiro se hacen con las alcaldías de Vigo y Lugo, sus maridos hagan lo mismo y se pongan a inaugurar cositas. Sinceramente, lo dudo. Fíjense lo escondido que tiene Luisa Fernanda Rudí a su interesante esposo frente a lo vista que nos resulta Gemma Ruiz .... Quejas por no manosear Sigo con mujeres. En la provincia japonesa de Nagoya se llevó a cabo una iniciativa pionera: dedicar un vagón del metro sólo a las mujeres, porque llovían denuncias y quejas por el manoseo y acoso sexual de los varones hacia ellas aprovechando las apreturas. Pues la empresa recibe 15 quejas diarias contra esta medida, y once están firmadas por varones. Funcionarios «paranormales» El doctor Fernando Jiménez del Oso, experto en asuntos del más allá, dice que los edificios oficiales son los lugares donde más se manifiestan los fenómenos paranormales, «quizás porque muchos de ellos se encuentran en edificios antiguos» cree el infeliz. Pues no. Los motivos son: hay mucho fantasma, deambulan sin oficio conocido un montón de cadáveres políticos y cabezas cortadas y proliferan las puñaladas traperas. Con estos ingredientes, nadie se extraña de fenómenos paranormales. Alberto, en México Y hablando de paranormalidades, Alberto de Mónaco ha estado en México. Fue por una cosa del COI pero más que en reuniones se le vio en compañía de dos populares presentadoras de la televisión; en su línea, vamos. El príncipe comió tacos de carne con guacamole, fue de discoteca, descubrió un balneario de Acapulco y tomó tequila. Ah, visitó las pirámides de Teotihuacán, que no todo va a ser trabajar.