Investigan si el accidente mortal de Santiago lo provocó un pique entre conductores

Xurxo Melchor
Xurxo Melchor SANTIAGO DE COMPOSTELA

SANTIAGO CIUDAD

Estado en el que quedó el BMW serie 1 blanco cuyo conductor huyó inicialmente del accidente y que posteriormente se presentó voluntariamente en el cuartel de la Guardia Civil de Santiago
Estado en el que quedó el BMW serie 1 blanco cuyo conductor huyó inicialmente del accidente y que posteriormente se presentó voluntariamente en el cuartel de la Guardia Civil de Santiago CEDIDA

El tipo de golpe ocurrido el sábado en Marrozos apunta a una maniobra brusca para evitar un adelantamiento

06 oct 2020 . Actualizado a las 23:27 h.

La escena que se encontró la Guardia Civil de Tráfico en el accidente mortal que se registró en la madrugada del pasado sábado en Marrozos es difícil de explicar porque se produjo en un tramo bien asfaltado y con doble carril en la subida. Una de las tesis que manejan los investigadores es que los vehículos que conducían el herido grave en el siniestro y el que salió ileso y huyó inicialmente del lugar de los hechos —después se presentó voluntariamente en el cuartel— se enzarzaron en un pique que tuvo como fatal resultado que uno de ellos acabase impactando frontalmente con el coche que circulaba en sentido contrario, causándole la muerte en el acto al tercer implicado.

El accidente se produjo a la 1.30 horas en el kilómetro 304,900 de la N-525, la carretera que une Santiago con Ourense. El lugar del impacto está situado en un punto en el que existe una curva abierta que, si bien no impide la visibilidad, sí que debió afectar para que el conductor fallecido no tuviera tiempo a reaccionar, más aún porque todo indica que el coche contra el que impactó circulaba a gran velocidad.

La primera explicación que recibió la Guardia Civil de lo sucedido fue a través del herido, el que chocó frontalmente con el coche del fallecido. Culpó a un tercer implicado huido y su hermano inició una campaña en redes sociales para localizar al conductor del BMW serie 1 de color blanco que, según su versión, fue el que provocó el siniestro al hacer una maniobra brusca.

Estos dos turismos circulaban en sentido Ourense por el tramo que tiene dos carriles, lo que hace muy difícil explicar por qué se produjo ese volantazo que hizo que el BMW impactase lateralmente con el otro coche y que este, a su vez, chocase frontalmente con el del fallecido.

Cuando el conductor del BMW blanco se presentó en el cuartel de la Benemérita en Santiago con el coche implicado, la carrocería presentaba un golpe en la puerta del conductor y en las aletas delantera y trasera y tenía restos de pintura de otro color, detalle que en principio señala que tuvo participación en lo sucedido. Él negó ser el causante del siniestro y la tarea que tiene ahora por delante la Guardia Civil es determinar qué implicación tuvo cada uno y si ambos circulaban a gran velocidad en una maniobra de adelantamiento que el otro intentó evitar y de ahí que acabaran impactando lateralmente.