Alicia Barreiro, madre de la joven de Rois que se suicidó: «Non lle desexo a ninguén o que pasei; é moi duro, e máis ao ser filla única»

Uxía López Rodríguez
Uxía López ROIS / LA VOZ

ROIS

ALVARO BALLESTEROS

La madre de Nerea habla un año después del suceso y mantiene que todo empezó por el acoso escolar

04 oct 2021 . Actualizado a las 22:47 h.

«Non lle desexo a ninguén pasar polo que eu pasei; foi moi duro e ségueo sendo, máis cando se trata dunha filla única». Son las palabras de Alicia Barreiro Trigo, la madre de Nerea, la joven de 17 años de Rois que se quitó la vida hace justo un año. La menor estaba enferma y a tratamiento médico desde hacía tiempo y, un año después de su muerte, su familia sigue manteniendo que todo empezó con el acoso escolar que sufrió «desde pequeniña», acoso que después pasó a las redes sociales y fue «incontrolable», en palabras de su madre.

Estos días son especialmente duros para ella, que saca fuerzas para hablar de cómo se siente y de lo que piensa un año después. «Dun mes para aquí cústame levantarme polas mañás porque o recordo está moi presente», afirma. Estos doce meses «funo levando como puiden, sen pecharme na casa porque sería insoportable xa que estaría todo o día chorando», asegura. El apoyo de su marido, Juan Ramón Castaño Iglesias, también fue clave en tratar de sobrellevar la desgracia.

En el comedor de la casa de Alicia Barreiro, una fotografía de la niña con una vela siempre encendida le ayuda a tenerla más presente, si cabe. Un año después aún no acepta la versión oficial de que en los dos centros en los que su hija cursó estudios obligatorios no haya constancia del supuesto acoso que denuncia la familia. «Saben ben que fun moitas veces aos colexios por ese tema, pero non me volvería a pasar porque onde hai que denunciar é na Garda Civil, para que miren un pouco máis por estes casos. Dá rabia que digan que non tiñan constancia de nada», lamenta entre lágrimas la progenitora.

Que no hay constancia en los centros del supuesto acoso fue la conclusión a la que llegó la Consellería de Educación tras reunirse, a instancias del Concello, con las responsables de los dos colegios. «Cando cambiou de centro, aviseinos ben do que pasaba, de que viña doutro no que sufrira acoso, pero non serviu de nada», cuenta la madre.

En su momento, anunció medidas legales contra los colegios, pero finalmente no las tomó. «Non quixen remexer nada máis», afirma Alicia Barreiro. Sí lo hizo, en cambio, contra el equipo médico que trataba a la niña, por no ingresarla al ser el tercer intento de suicidio en 15 días, el último consumado.

«Non sei que lle pasou ese día»

Cuando se quitó la vida, Nerea estudiaba un módulo de cerámica en el Centro de Educación Especial Manuel López Navalón en Santiago, en el que «estaba moi contenta e os profesores tamén con ela. Non sei que lle puido pasar ese día pola cabeza», se lamenta la madre, que tiene claro que hizo todo lo posible por ayudar a su hija, que estaba en manos de profesionales.

Hace un año y durante todos estos meses, a Alicia Barreiro no le han faltado muestras de cariño y apoyo de familiares, amigos, conocidos y otras personas, algo que agradece de corazón, además del amor de su marido. También tiene palabras de agradecimiento para el alcalde de Rois, Ramón Tojo, que le ayudó a parar el agrio debate que se generó en las redes sociales y en los medios de comunicación a raíz de que un colectivo vinculara el suicidio de Nerea con su sexualidad. «Ela non sabía nin o que era, por moito que o dixera», asegura la madre al tiempo que recuerda que Nerea era menor de edad y eso no se respetó.

Además de tener que tragar con que no hubo el supuesto acoso escolar, para Alicia Barreiro lo peor fue tener que escuchar y leer que no cuidaba de su hija, por lo que tuvo que difundir un comunicado pidiendo respeto para su dolor. Al primer aniversario de la muerte de su hija se suma, además, el fallecimiento de otro familiar próximo, por lo que la tristeza es aún mayor para esta mujer, aunque también mira al futuro y no esconde su ilusión por volver a ser madre.