Los afectados por el incendio de Ames recuperan sus coches veinte días después: «Saqueino enseguida»
AMES
La Policía Local supervisó la salida de los vehículos, retirados por sus dueños al exterior donde los recogieron las grúas
15 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Los propietarios que tenían inmovilizados sus vehículos en la planta segunda del garaje de Bertamiráns (Ames) que sufrió un incendio el pasado 26 de diciembre pudieron retirar ayer sus automóviles. Lo hicieron con la tranquilidad de que, aparentemente, los daños sufridos no parecen importantes ya que todos los coches encendieron sin problemas, pese a que se encontraban cerca del origen del fuego, por lo que los automóviles estaban llenos de ceniza.
Esta particular operación salida comenzó pasadas las diez de la mañana, aunque afectados por el incendio del garaje del inmueble, en el número 75 de la avenida da Maía de Bertamiráns, señalaron que previamente fue necesario mover algunos puntales para que la maniobra de giro de los automóviles fuese posible.
Cada vecino tuvo que solicitar servicio de grúa a su compañía aseguradora, pero, bajo supervisión técnica y con vigilancia de la Policía Local, se instó a los propietarios a que probasen si sus coches encendían para así agilizar su salida sin que las grúas adaptadas para trabajar en garajes bajasen hasta la planta incendiada. Según reconoció una de las afectadas, «arrincaron todos, e o meu saqueino enseguida, o que demostra que isto se puido ter feito antes».
En la zona cero del incendio quedaron cuatro automóviles. Dos de ellos están dentro del perímetro acordonado por la Guardia Civil, otro está pendiente del informe del perito sobre su estado y el cuarto no pudo ser retirado ayer porque su dueño no fue localizado.
La investigación sobre el vehículo en el que se originó el fuego y se extendió por la planta del garaje sigue abierta. Su resultado será determinante para que los afectados reclamen compensaciones por el incendio de sus vehículos (en el caso de los automóviles quemados), por los gastos ocasionados a los dueños de los coches que no pudieron ser retirados hasta ayer, a la comunidad de propietarios del edificio y a los vecinos cuyos trasteros también sufrieron los efectos del fuego, el humo y la ceniza.