Rosas azules para José Manuel Pose, un homenaje desde el anonimato para un querido piloto de ralis

Uxía López Rodríguez
uxía lópez ROIS / LA VOZ

SANTIAGO

UXÍA LÓPEZ

Solo la familia sabe quién deposita todos los años un ramo de estas flores

01 nov 2025 . Actualizado a las 22:02 h.

Un pequeño ramo de rosas azules —son naturales, pero teñidas de ese color— llaman la atención entre todas las flores del cementerio de la parroquia de Leroño, en el municipio de Rois. Desde hace 12 años, el día 1 de noviembre siempre aparecen depositadas junto al panteón de la familia de José Manuel Pose, el piloto de ralis de Rois fallecido en 2013 a los 39 años de edad.

«Non falla ningún ano», dice la madre del piloto, Mercedes Castelo, quien se emociona al hablar de su hijo y de la bonita historia que tienen detrás las rosas azules. En la actualidad, la familia sabe quién las deposita cada primero de noviembre pero, durante siete años, no supieron quién era la persona que se acordaba de su hijo en una fecha tan señalada.

Fue a raíz de una publicación en la que los padres de José Manuel Pose manifestaron su agradecimiento por el emotivo gesto y el deseo, en particular de la madre, de saber quien era esa persona cuando esta se dio a conocer a través de hermano del piloto, Ángel, al tiempo que expresó su deseo de permanecer en el anonimato, deseo que ha respetado la familia siempre. Después también habló con el padre del piloto, ya fallecido.

«Estaremos agradecidos de por vida de que se acorde do noso fillo», asegura emocionada la madre, quien dice que la persona que lleva las flores era un gran amigo del piloto y más que eso. «Eran cómplices e so eles saben o que significan as rosas azuis», asegura Mercedes Castelo, quien añade que otros amigos de su hijo también le llevan flores el resto del año. En cuanto a la identidad del que deposita el ramo de rosas azules, ella respeta su deseo de permanecer en el anonimato, quizás porque no quiere destacar sobre esas otras personas que llevan flores a la tumba de su hijo, señala la madre. Ella suele ir un día o dos al cementerio por semana, pero el 1 de noviembre no es una fecha que le guste especialmente ir, aunque tenía previsto hacerlo para colocar el ramo de rosas azules a cubierto ya que, explica, son bastante delicadas y se estropean con la lluvia.

Sobre el significado de las flores, en su día Mercedes Castelo pensó en el color del último coche con el que compitió su hijo, un azul similar al de las rosas, y, en cuanto al número, cuatro como las ruedas del automóvil.

La madre vuelve a expresar su agradecimiento por la flores a la persona que las lleva y a la que, según dijo en su día, el cementerio de Leroño no le queda cerca ni a mano y, aún así, no falla el 1 de noviembre. Doce años dejando un ramo demuestran, para Mercedes Castelo, que, «esa persoa, como nós, ten ao meu fillo moi presente e máis nestes días», dice. Y mientras esa persona pueda, en Difuntos no faltarán las rosas azules en la tumba de José Manuel Pose, añade.