Sancionan a cuatro sanitarios del centro médico de Fontiñas por aparcar 16 coches en la zona habilitada para 12

M. Mosteiro, S. Gómez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Cuatro profesionales del centro médico de Fontiñas fueron multados por aparcar
Cuatro profesionales del centro médico de Fontiñas fueron multados por aparcar Sandra Alonso

«Se generó un problema donde no lo había», afirma María Jesús Cruces Artero, facultativa del centro

18 feb 2023 . Actualizado a las 00:33 h.

Han corrido ríos de tinta sobre los problemas de aparcamiento que ocasiona el Hospital Clínico. Pero, ni de lejos, es la única instalación sanitaria de Santiago que los sufre. El hospital de Conxo, así como los centros médicos de Fontiñas y Vite, padecen una situación similar que, aunque en menor medida, motiva que encontrar un hueco en los barrios donde se encuentran sea poco más que una quimera.

Lo saben a la perfección los profesionales del ambulatorio de Fontiñas. Ellos cuentan con 12 plazas asignadas, pero se las han arreglado para meter 16 coches. No tuvieron problemas hasta que recientemente la Policía Local visitó el lugar e impuso multas de 100 euros a cuatro de ellos. «Se generó un problema donde no lo había», afirma María Jesús Cruces Artero, facultativa del centro: «Lo único que hicimos fue arrimar los coches para conseguir aparcar los 16».

Descontando los huecos que pertenecen a los sanitarios, los restantes son insuficientes para un barrio donde el aparcamiento de Área Central se convierte en ineludible. Si se tiene que realizar alguna gestión en el centro médico o en los juzgados, no queda otra que pagar.

Esa realidad se asemeja también a la que se vive en Vite y Conxo, donde respectivamente el ambulatorio y el hospital congregan a una gran cantidad de profesionales y usuarios, lo que apenas deja espacios disponibles. En el primer caso, además, la presencia de varias facultades y áreas reservadas para residentes, agrava aún más las cosas.

A pesar de todos los problemas de aparcamiento que existen en los cuatro puntos, lo cierto es que su afección arranca el lunes y acaba al mediodía del viernes. Así se puede comprobar en el área del Hospital Clínico, donde es imposible encontrar un hueco hasta la llegada del fin de semana. A partir de ahí sobra espacio y las calles están prácticamente desiertas.

Solucionarlo se antoja imposible para el Concello de Santiago. Mientras, a los ciudadanos no les queda otra que apostar por los párkings privados. Toca pagar.