Luz de ciencia

Joel Gómez SIN INTENCIÓN

SANTIAGO

25 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Avanzar en ciencia no es fácil. Requiere tiempo. Una buena muestra son los años que se precisan para investigar un nuevo fármaco y que llegue a pacientes. Lo mismo ocurre en otras disciplinas. También en las Humanidades, en la Filología. Ricardo Carvalho Calero dejó constancia de las dificultades para estudiar y progresar en el conocimiento del idioma gallego, y en su docencia para una mejor formación. Entre quienes le secundaron en esta labor estuvo la recientemente fallecida profesora e investigadora Araceli Herrera Figueroa, una de sus discípulas, pionera como él en la enseñanza del idioma sobre bases científicas. Nos quedan decenas de trabajos suyos, en los que ha contribuido a dar luz a espacios oscuros de numerosos temas. Se posicionó en asuntos polémicos, de proyección internacional, como el de la seducción amorosa en la producción de Rosalía de Castro, que Araceli estudió en los libros Follas novas y En las orillas del Sar. Y dejó aportaciones sobre la literatura medieval gallego-portuguesa, Castelao, Carvalho Calero, Luís Pimentel, Pardo Bazán, Álvaro Cunqueiro, Armando Cotarelo, Vergílio Ferreira, J. Guisan Seixas o Xesús Rodríguez López, entre otras.

Desde que Carvalho comenzó en la USC, hasta su muerte, entre sus propios trabajos y los que orientó y auspició, el cambio en este campo del saber ha supuesto un auténtico antes y después. La USC edita Ricardo Carvalho Calero. As formas do compromiso, con motivo de la celebración de las Letras Galegas, que se distribuye con algún retraso, causado por la pandemia. Contribuye con un trabajo (¿el último?) Araceli Herrera.

 No podía faltar.