Escenarios compostelanos

Montse García Iglesias
Montse García AL TRASLUZ

SANTIAGO

31 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Redescubrir. Esa es una de las sensaciones que queda cuando uno deja sobre la mesilla de noche la novela Beleza vermella, de Arantza Portabales. Esos trayectos en coche de Santi Abad y Ana Barroso en su intento por hallar al autor de un asesinato son iguales que los que muchos podemos hacer a diario. Lo mismo sucede al escuchar a Fredi Leis entonar su «No hay ni un peregrino que se marche sin resaca. Dicen que es un pueblo lleno de otros pueblos. Dicen que no hay nada más bonito que vivir en Santiago» o a Budiño cantar acompañado de Xoel López «escoitabamos música de vellos para non ser disonantes coas túas pedras». Son solo algunos de los ejemplos recientes porque Santiago ha tenido de sobra quien le escribiese o le compusiese canciones. Al final, la forma en la que otros describen aquellos espacios conocidos nos invitan a hacer un recorrido muy diferente. Es otra forma de acercarnos a lo nuestro. Lugares y escenas a los que no le prestamos atención en el día a día por nuestra rutina toman fuerza al verlos plasmados en un libro, una canción o una película. Los miramos de otra forma. Quizás ese evocar lo conocido también nos acabe sorprendiendo. Y reconozco que me gusta ese redescubrir. Esa mirada distinta sobre el territorio cotidiano. Y, al final, me pregunto, ¿los que no conocen Santiago tendrán la sensación de que ya han estado aquí cuando la pisan por primera vez después de leer una historia o escuchar una canción? ¿Se imaginarán a los personajes de la novela recorriendo esas calles? Reconozco que me ha pasado más de una vez.