Hemeroteca

SANTIAGO

20 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Una de las grandes joyas del diario que sostiene entre las manos o que ve en una pantalla es su extraordinaria hemeroteca. Digitalizada al completo desde hace un tiempo, encierra un singular relato histórico de Galicia desde el 4 de enero de 1882 hasta esta misma mañana. A veces, seguro que más de la cuenta, me entretengo con el buscador localizando a mis antepasados entre los listados de pasajeros que compraban billete hacia La Habana, que se publicaban completos; o recuperando las páginas deportivas de principios de los 90 en las que Naso Calvo escribía sobre el futuro que tenía por delante una joven promesa del baloncesto local. No acertó.

También trabajo con esta herramienta, no se crean. De hecho, se me ha dado por rebuscar entre los cascotes de las obras que van a paso de tortuga, y el resultado es el que sigue. En mayo del 2002, la Xunta de Fraga y Cuíña presentó su plan viario para Santiago, y en el mismo se hablaba por primera vez de la variante de Aradas, que está en construcción en estos momentos y que se inaugurará con suerte en el 2018. Solo unos meses después, en octubre de ese mismo año, el Ministerio de Medio Ambiente liderado por un tal Jaume Matas reveló la «urgente» necesidad de trasladar la depuradora de A Silvouta. Sin comentarios. Tres años antes, en 1999, Renfe y Política Territorial presentaban una estación intermodal que era «o futuro do transporte», según el crédulo exedil Carlos Abellán.

Estas voluntaristas informaciones eran lo que eran, motos políticas millonarias que, eso sí, reflejaban necesidades ciudadanas. Ahora nadie nos promete nada, como si fuéramos niños ricos que ya tenemos de todo. Y tampoco es así.