Giménez Bartlett: «Santiago es un sitio al que hay que volver»

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Álvaro Ballesteros

La gira de los premios Planeta recaló en la capital gallega, en donde hablaron de sus novelas y proyectos

11 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No era la primera vez que pisaban la capital gallega. Alicia Giménez Bartlett ya había estado en la ciudad, en otras presentaciones literarias y como turista. «Santiago es un sitio al que hay que volver, siempre», sentencia la ganadora del premio Planeta. Su compañero de gira, el finalista del certamen Daniel Sánchez Arévalo, reconoce que antes de comenzar con el recital de entrevistas que les esperaban desde primera hora cargó las pilas bajo la niebla de Compostela, «una ciudad maravillosa. Lo primero que hice esta mañana fue dar un paseo y perderme por sus calles», añade.

Ambos comparten un momento dulce profesionalmente. La vencedora del premio dice estar en un punto «de gran intensidad». Hace 31 años de su primera novela, Exit, y asegura que «dudo ahora más que entonces», aunque le tranquiliza la idea de que «ya no estoy compitiendo por hacerme un nombre en el mercado». «La juventud me daba una inconsciencia y unas ganas de narrar un poco ciegas. No veía los errores, mientras que ahora todo me da miedo: no contar lo que de verdad quiero, ser aburrida, ser complaciente... El escritor está solo para evaluar su trabajo y eso es duro», cuenta. Es su marido, un ingeniero de caminos, en quien confía «como sparring», pues es capaz de «pasar por los ojos de la lógica» sus ficciones.

En el caso de la obra premiada, Hombres desnudos «quería dejar claro que me interesaba la crisis, porque es lo suficientemente grande como para que empecemos a pensar que no es fugaz, y hablar del cambio de roles entre hombres y mujeres», dice Giménez Bartlett.

Sánchez Arévalo, por su parte, reconoce que ha cumplido su sueño literario. «He estado con películas, estrenos, Goyas... y es la primera vez que todos mis vecinos me paran para felicitarme». Dedicó dos años en exclusiva a La isla de Alice, una novela en la que se mete en la piel de una mujer, y cuyo premio le permitirá ahora embarcarse en el siguiente proyecto a dos años vista, su quinta película.