Deberá indemnizar al Concello con cerca de 1.200 euros por el valor del cobre sustraído en el 2011 en la calle Samos
25 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Cinco meses de prisión. Esa es la pena impuesta el pasado diciembre por el juzgado de Instrucción número 3 de Santiago al autor de un robo de cable de cobre de la red de alumbrado público en la calle Samos, en Pontepedriña, en marzo del 2011. El autor, sin antecedentes penales, por lo que no tendrá que ingresar en prisión, fue sorprendido por la Policía Local, junto con otra persona que no lograron interceptar, cuando introducían en una maleta cable de tierra que previamente habían cortado de las arquetas del registro del alumbrado público.
La maleta, en la que portaban una cizalla, quedó abandonada cuando se dieron a la fuga, aunque solo uno logró zafarse de la persecución policial, según los hechos probados que recoge la sentencia de la que ayer dio cuenta el Ayuntamiento, que se personó en la causa como parte afectada y al que el ahora condenado deberá indemnizar con 1.178 euros (además de intereses), el coste en que se valoraron los 450 metros de cable que se hallaron en la maleta y que no resultan reutilizables.
El juzgado encontró culpable al condenado como autor de un delito de hurto en grado de tentativa y le ha impuesto también el pago de la mitad de las costas procesales, incluidas las de la acusación particular.
El fallo se ha recibido con «gran satisfacción» en el Ayuntamiento, según el concejal de Servizos, Juan de la Fuente, quien entiende que debe ser una sentencia «exemplarizante» ante un delito que está suponiendo un importante quebranto a las cuentas municipales. De hecho, en los últimos tres años el Concello ha tenido que hacer frente al gasto de 313.000 euros para la reposición del cable robado. El 2011 fue el ejercicio donde la sustracción de cobre se notó en mayor intensidad, con un gasto de 180.000 euros, que se redujo a 78.000 y 55.000, respectivamente, en las dos anualidades siguientes.
La Administración local está pendiente de las resoluciones judiciales de otros tres casos, según De la Fuente, quien ayer valoró el esfuerzo que las policías nacional y local y la Guardia Civil están realizando para evitar estos robos.
El Ayuntamiento presupuestará por primera vez este año una partida específica de 100.000 euros para hacer frente a los gastos que puedan generar nuevos robos, aunque el edil espera que no haya que echar mano de ella. El Concello y la concesionaria del mantenimiento del servicio tuvieron un largo litigio sobre a quién correspondía afrontar el coste de esas reposiciones, que finalmente asumió el Ayuntamiento, aunque para la próxima concesión, que se licitará en breve, Raxoi obligará a la adjudicataria a concertar un seguro que se haga cargo de esos costes en el futuro.