Manolo recuerda un episodio en Muros de San Pedro. En plenas fiestas acudió a la oficina un quinto de permiso, acompañado por un amigo, con la intención de mandar un telegrama trapalleiro al cuartel para que le prorrogasen la libranza. «¡A ver, que poñemos!», le preguntaba el amigo. «Pon... pon... xa sei: Mi padre sigue enfermo. Ruego prórroga permiso». Cuando Manolo se disponía a telegrafiar, el quinto rectificó: «¡Non, que hai que aforrar palabras! Pon así: Padre inmejorable. Ruego prórroga permiso».
López se toma unas merecidas vacaciones indefinidas, que 54 años escuchando las conversaciones de los demás es toda una vida. Para acabar, ¿le apetece un reto? Busque un conversor y traduzca esto: «-.. .. ... ..-. .-. ..- - . / --.- ..- . / .-.. .- / ...- .. -.. .- / . ... / -.-. --- .-. - .- ». Manolo lo haría de oído.