Patio de vecinos A pocos días de que finalice el año santo, miles de personas abarrotan la ciudad y hacen todo lo posible por encontrar sitio en una catedral desbordada
06 dic 2004 . Actualizado a las 06:00 h.?e va acabando el año y se cuentan todavía por centenares los colectivos que se desplazan a Santiago con la intención no sólo de ganar el jubileo, sino de presentar al Apóstol sus respetos y de pedir su intercesión en las inquietudes más diversas. El de ayer fue un día de mucho movimiento entre las paredes del templo, con miles de personas tratando de hacerse un hueco en una de las metas de la cristiandad. Los hospitaleros voluntarios del Camino de Santiago y la Asociación de Amputados Ibérica Oampi se encargaron de las invocaciones en la misa de doce. Hubo que apretarse para dar cabida a las cofradías de Nuestro Padre Jesús del Silencio y de Nuestra Madre del Mayor Dolor, ambas de Pontevedra, y a la Adoración Nocturna Femenina de la Diócesis de Santiago. Tampoco faltaron las carmelitas descalzas del santuario de Santa Teresa del Niño Jesús de Lleida y, por la tarde, la hermandad del Santísimo Cristo de la Veracruz, María Santísima y Santiago Apóstol de la parroquia de la Asunción de Huevar y Aljarafe, en Sevilla. Todos comprobaron que Santiago bien vale una misa. Diáconos ?ás de 150 personas llegadas desde diversos puntos de España, Alemania, Italia, Francia y Portugal participan hasta mañana en el Encuentro de Diáconos Permanentes que se celebra en el Seminario Mayor. El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, fue el protagonista de la jornada de ayer con la ponencia titulada El papel y el misterio del diácono anuncia el Evangelio de la esperanza. Hoy, el doctor Santiago del Cura, el profesor P. Didler Gonneaud y monseñor Joaquín López de Andújar centrarán la atención del encuentro. A las cinco de la tarde, Javier Igea López-Fando y el diácono Enzo Petrolino presentarán las conclusiones de este seminario. Tanto los diáconos como las personas que llenan estos días la catedral contribuyen a elevar el número de visitantes por el que suspiran las autoridades locales y autonómicas. La presencia de un generoso anticiclón está contribuyendo a que el año santo 2004 tenga un cierre espectacular del que toda la ciudad sale beneficiada. La satisfacción de quienes nos han visitado es la mejor campaña publicitaria que se puede hacer para garantizar muchas más visitas.