El baile de los coroneles

María José López Caldeiro

CULTURA

María José López Caldeiro. 52 años. Lugo. Administrativa

21 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Me contaba Violeta que por motivos de trabajo tuvo que asistir a un evento en el que la mayoría de los asistentes iban uniformados. Ella también, pero su uniforme negro luto riguroso no tenía nada que ver con el elegante azul marino aguas profundas de los allí reunidos. La única nota de color que se pudo permitir fue la servilleta inmaculadamente blanca e impecablemente doblada sobre su antebrazo derecho.

¡Cómo envidiaba aquellos entorchados sobre los hombros, aquellos relucientes botones que destellaban bajo la luz de las lámparas de cristal de strass. ¡Y sus modales! Tan comedidos, tan cuidadosos, tan refinados… En definitiva, tan marciales.

¡Con qué mimo cogían la copa de cava para brindar! ¡Con cuánta exquisitez saboreaban la mousse de queso fresco con frutos rojos!

Sonaron las primeras notas. El baile comenzaba. Algunas parejas ya estaban en la pista y con suma elegancia seguían los acordes del vals, deslizándose sobre el mármol del suelo casi sin pisarlo.

Al vals le siguió una cuidada selección de exquisitas y nostálgicas baladas que, aunque un poco ñoñas, hicieron las delicias de los asistentes. Y entonces sucedió: el DJ, sin duda un nostálgico, pinchó un disco de Rafaella Carrá. Y al compás del «…explótame, explótame, expló…» las melenas se liberaron de sus horquillas y el botón superior de la guerrera se soltó por fin.

Y Violeta vio cómo se rompía la magia: aquellas personas también tenían sus debilidades.