«Papá, cómprame un helado»

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

SANXENXO

Ramón Leiro

El sol del puente de san José llena el paseo de Silgar y anticipa una buena campaña de Semana Santa

19 mar 2019 . Actualizado a las 19:58 h.

El sol luce en un cielo sin nubes y una playa, Silgar, en la bajamar de la mañana, invita a mojar los pies, mientras los más pequeños juegan en la arena. A escasos metros de la playa, solo subiendo las escaleras, toda la oferta imaginable de terrazas, cafeterías y restaurantes en un paseo marítimo de esos que se inmortalizan en una cadena de selfies. Este es Sanxenxo en el Día del Padre, o de san José, o si lo prefieren a secas, el 19 de marzo. Este puente ha sido de bastante buen tiempo, soleado aunque algo ventoso, y el atractivo de la capital de las Rías Baixas vuelve a pasar la evaluación con sobresaliente. Mantiene intacto su tirón entre los visitantes.

Silgar a primera hora de la mañana es una escena bucólica de una playa casi desierta, donde pasean algunas personas con sus perros. Hacia el mediodía, el paseo empieza a cobrar vida y mientras más y más personas, tanto vecinos como visitantes, se acercan a la joya de la corona de las playas pontevedresas, el sol sigue luciendo y el termómetro subiendo grados en el escalafón.

A la una de la tarde, MeteoGalicia informa de 16 grados, que subirán a una máxima de 18. Mientras, sobre la arena, continúa aumentando el número de paseantes. No hay aún sombrillas, aunque se puede ver alguna silla aquí y allá. El agua, transparente como un cristal, se asemeja a las estampas clásicas del Caribe, aunque a una temperatura más fría. La primavera ya se siente, pero aún no llegó la temporada de baño, por ahora, en este puente toca pasear, jugar sobre la arena y relajarse.

Optimismo en el sector

En el paseo, el creciente trasiego de personas es una prueba evidente de que hay hambre de sol y de caminar. Entre los retazos de conversaciones que se escuchan, las felicitaciones por el Día del Padre se mezclan con la insistencia de más de un pequeño. «Papá, cómprame un helado», a lo que muchos de los aludidos responden con el típico «primero hay que comer».

Las terrazas, llenas hasta la bandera y, en hora punta, un indicio de que esta jornada es especial y que Sanxenxo está llenándose por el festivo. El acceso al párking de Nauta y al paseo marítimo desde la calle Madrid y la avenida de León, colapsaban por momentos.

El presidente del Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo (CETS), Francisco González, no se atreve a ponerle cifras a la afluencia, si bien admite que «en este puente Sanxenxo está lleno» porque «la gente tiene muchas ganas de salir». González estima que el 25 % de la oferta de establecimientos está abierta por san José. Puede sonar a poco, pero no lo es. Es un porcentaje que suma más plazas hoteleras y de restaurante que el 100 % de otras localidades mucho más grandes en número de vecinos.

En el sector se mira esperanzado al cielo. Si el astro rey luce a mediados de abril como lo ha hecho estos días de marzo, «Semana Santa será un éxito», apuntan desde el CETS.