Cuando septiembre es mejor que agosto

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

SANXENXO

El turismo cultural comparte con el sol el atractivo de la comarca entre los visitantes

11 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Un verano como no se recordaba en años está a punto de terminar, después de un julio muy bueno y un agosto excelente. Septiembre es un mes tradicionalmente más flojo a la hora de recibir visitantes y, sin embargo, Pontevedra y su entorno reúnen elementos turísticos suficientes para que aquellos que se han tomado las vacaciones ahora encuentren bastantes ventajas frente a la temporada más alta de la campaña estival.

En Sanxenxo, capital turística de las Rías Baixas por excelencia, lo tienen claro. Vale la pena acercarse por este municipio aún en septiembre. ¿Qué ventajas hay frente a agosto? Más de las que se piensa. Por un lado, hay menos gente, lo que favorece la estancia a aquellas personas que busquen relajarse más que tumbarse al sol en Silgar. Aún así, el frente marítimo sanxenxino sigue siendo objeto de deseo de miles de personas, por lo menos mientras no empiecen las clases y los niños tengan que regresar al colegio. ¿Por qué? Porque el tiempo aún es bueno. Puede refrescar un poco de noche y la lluvia puede caer algo más que el mes pasado, pero, y esto es fundamental, las temperaturas siguen siendo altas y poner la sombrilla en primera línea en Silgar es mucho más fácil. Menos gente, más playa. Así se de sencillo y con el aliciente de un cielo que, en lo que va de mes, ha estado despejado casi todos los días. El viernes, por ejemplo, los termómetros superaron con creces los veinte grados a media mañana. Este fin de semana no ha brillado tanto el sol, pero se espera que lo haga pronto.

El presidente del Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo (CETS), Francisco González, lo expone de esta forma. Ventajas de dejarse caer por la ría en septiembre: Muchas. «Sin duda alguna, se gana en tranquilidad, porque aunque hay muy buena ocupación en los hoteles, el turismo de familias con niños baja porque va a empezar el colegio y esto significa más oportunidades de relax». González añade: «El clima es el mismo que en agosto, los restaurantes tienen menos aglomeraciones, por lo que conseguir sitio es más fácil, tenemos los mismos servicios y la calidad es idéntica».

Más ventajas, los conductores se ahorran la media hora de colas diarias entre Sanxenxo y Portonovo, que desesperan en agosto. Aparcar es ahora relativamente fácil en la villa turística. Las bolsas de Sanxenxo y Portonovo funcionan bien y los párkings de pago ya no cuelgan durante horas el cartel de completo.

En la ciudad de Pontevedra, la primera quincena de septiembre, al igual que en Sanxenxo, también está dejando un buen sabor de boca. El presidente de los hoteleros, José de Cabo, explicó que la tendencia de esta primera mitad de mes es de que «se van a superar todas las previsiones», porque la tasa de ocupación es muy alta». El cierre de la campaña estival del 2016 va, en este sentido, a dar previsiblemente una «sorpresa agradable» a este sector, vital para la creación de empleo y la economía de toda la comarca.

Aún se buscan camareros

Llama la atención, por otra parte, que en las ofertas de empleo que publicitan establecimientos turísticos en lugares como Sanxenxo y Portonovo todavía hay abundantes propuestas de trabajo para camareros. Es una situación que no tiene precedentes en veranos anteriores.

Septiembre arrancó muy bien en la ciudad del Lérez con una Feira Franca que llenó Pontevedra hasta la bandera. El sábado más multitudinario de todo el mes, sin duda alguna, y quizás de todo el verano. El éxito de la celebración histórica pontevedresa está consolidado. De Cabo indica que aquellas personas de fuera que no conocían la fiesta y que se han acercado a la capital «han visto algo poco usual».

El portavoz de los hoteleros pontevedreses coincide con su homólogo sanxenxino en la buena climatología de este mes como un valor a tener en cuenta. «En septiembre solemos tener una climatología bastante aceptable, muchas veces mejor que en agosto». Esta última aseveración no será aplicable a este agosto de altas temperaturas, pero la primera parte de la frase sí que se mantiene en pie. Con temperaturas agradables y algunos días muy elevadas y con la playa a tiro de piedra, los turistas que se acercan a la comarca no se verán defraudados este mes.

A mayores, De Cabo incide en otro factor relevante. La gastronomía. Platos con productos de primera calidad y vinos de entre los mejores de España tienen difícil rival. El buen comer en las Rías Baixas, por sí solo, es un reclamo turístico de primera magnitud. «Es un tema en que la gente sabe a lo que viene», resaltó el presidente pontevedrés.

El turismo cultural tiene, asimismo, su peso en la oferta de entretenimiento de la comarca. El sol brilla muchos días, pero para aquellos en los que el cielo esté ceniciento, es la oportunidad de aprovechar y admirar el rico legado histórico de la comarca. En este capítulo, el centro monumental de Pontevedra ocupa una posición estelar en Galicia. Sus plazas, como A Leña o A Ferrería son referencia obligada para los objetivos de cámaras y móviles de los visitantes. El Museo Provincial es uno de los mejores del noroeste de la Península y su atractivo se ha multiplicado con la reapertura de las ruinas del convento de Santo Domingo.

En la agenda cultural de este mes, destacan el festival de cortometrajes FICBueu hasta el domingo 18, con proyecciones diarias; y Núbebes, que citará a pequeños y padres en el Teatro Principal, la Casa Azul y la Casa de Campás del 16 al 25.

Y para aquellos que sean aficionados a la naturaleza, la isla de Ons todavía seguirá accesible para los visitantes a través del transporte de pasajeros. Durante unos días más aún se podrá seguir embarcando en Sanxenxo o Portonovo, pero para aquellos que quieran hacerlo a finales de mes aún funcionará la línea desde Bueu. Así que, en todos los sentidos, septiembre rivaliza bien con agosto.