Pontevedra da los primeros pasos para licitar el vial de Mollavao
PONTEVEDRA CIUDAD
El Concello encarga la revision del coste del proyecto, que en el 2020 era 940.000 euros
29 abr 2024 . Actualizado a las 12:54 h.Tras lograr desbloquear con Costas la cesión del terreno para construir el vial de Mollavao, el Concello de Pontevedra no quiere perder más tiempo para impulsar un proyecto que supondrá un antes y un después para el barrio, ya que su ejecución permitirá afrontar la humanización de la calle Rosalía de Castro. Esta misma semana el concejal de Mobilidade, César Mosquera (BNG), comenzó a dar pasos para licitar una obra que lleva demasiado tiempo en un cajón. Concretamente, firmó la orden para revisar los precios que figuraban en el proyecto aprobado en el año 2020, cuando se cifró el coste de la obra en 938.824 euros.
El objetivo del Concello en un escenario ideal es que la licitación pueda convocarse antes del verano para adjudicar la obra a la vuelta de las vacaciones, de modo que los trabajos arranquen este mismo año. Hay que recordar que la obra la financia la Diputación, que en el año 2021 suscribió un convenio con el Concello e incluyó el nuevo vial en su Plan de Estradas. Esto último da el amparo legal al proyecto, ya que no de otra manera sería necesario acometer una modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal.
La Diputación respetará el convenio firmado, tal y como acordaron en el inicio del actual mandato el alcalde, Fernández Lores, y el presidente provincial, Luis López, y será el Concello el que se encargue de licitar la obra y de supervisar su ejecución.
En principio el proyecto no se tocará, aunque el Concello era partidario de reducir la anchura prevista de la calzada, ya que con la configuración que se incluyó en el documento técnico quedaría un arcén amplio que podría ser utilizado como estacionamiento. Hay que recordar que el futuro vial atraviesa la llamada «parcela de los circos», que actualmente se emplea como estacionamiento disuasorio.
El vial de Mollavao discurrirá entre dos glorietas, una en la avenida de Marín y otra en la PO-546, cuya construcción se incluye en el proyecto. La longitud de la vía entre las dos rotondas será de 97 metros y su ancho será de quince metros, divididos en una sección de dos carriles de cuatro metros, dos aceras de un metro y arcenes de dos metros y medio. La glorieta más próxima a la ría tendrá un radio exterior de 16 metros, mientras que la interior será más pequeña, de trece metros de radio.
El objetivo de este vial y su relación con la futura transformación urbana de Mollavao es clara, ya que reconducirá el tráfico de entrada a Pontevedra procedente de la carretera vieja de Marín (PO-546). De esta forma se podrá reducir el tráfico en los 600 metros de zona más urbana de la calle Rosalía de Castro, los que van desde la rotonda con María Victoria Moreno hasta el puente del tren. Al derivar por la nueva infraestructura el tráfico de entrada a la ciudad, el citado tramo de Rosalía de Castro quedará con un único carril de salida, lo que permitirá ampliar las aceras y humanizar todo el entorno.
El Concello también elaboró en su día un anteproyecto de esta reforma de Rosalía de Castro, pero será necesario actualizarlo. La idea poder iniciar su tramitación al mismo tiempo que se ejecuta la obra del vial, presumiblemente a lo largo del próximo año.
La humanización de Rosalía de Castro es una vieja demanda de los vecinos del barrio, que esperan que no la transformación de Mollavao incluya también otras mejoras.
El aparcamiento disuasorio podría trasladarse al sur de la nueva infraestructura
La ansiada resolución de Costas otorgando «al Ayuntamiento de Pontevedra la concesión de ocupación de unos 2.420 metros cuadrados de bienes de dominio público marítimo-terrestre con destino a la realización del proyecto de nuevo vial entre la PO-546 y la avenida de Marín» se hizo realidad a mediados de marzo. Tras varios años olvidado por Costas, el documento fue desbloqueado a raíz el acuerdo por el BNG dio su voto para la investidura de Pedro Sánchez. Recoge que la concesión será por 15 años prorrogables otros 15 y establece varias condiciones. Entre ellas, que se acometa un proyecto de «renaturalización» de los terrenos adyacentes al futuro vial. ¿Significa eso que desaparecerá el aparcamiento disuasorio que hay actualmente en esa parcela? Todo dependerá de hasta dónde se quiera extender el término «renaturalización» y si esta puede ser compatible con mantener el uso como aparcamiento disuasorio.
En cualquier caso, desde el organismo estatal se planteó una alternativa, que sería reubicar ese estacionamiento un poco más al sur del actual. Fue en la reunión que el concejal César Mosquera mantuvo con la directora general de Costas, Ana Oñoro, en Pontevedra el pasado día 4. La representante del Ministerio para la Transición Ecológica habría apuntado la buena disposición de Costas para desafectar y ceder al Concello los terrenos de dominio público marítimo-terrestre que en su día ocupó la constructora Malvar, así como parcelas colindantes. La idea sería habilitar en esta zona, con acceso desde la rotonda existente en la avenida de Marín, el aparcamiento actual.