El mantero interceptado en las fiestas de A Peregrina del 2017 llega a un acuerdo con el fiscal

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

POLICÍA LOCAL DE PONTEVEDRA

El acusado, finalmente, abonará una multa de 360 euros

05 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Transcurridos casi cinco años desde que fue interceptado con decenas de prendas falsificadas en las fiestas de A Peregrina del 2017, este hombre oriundo de Senegal, de 30 años y sin antecedentes penales, ha alcanzado un acuerdo con la Fiscalía de Pontevedra. De este modo, finalmente, ha asumido abonar una multa de 360 euros como autor de un delito contra la propiedad intelectual, una pena que contrasta con los ocho meses de prisión que solicitaba inicialmente la acusación en su escrito.

La sentencia, que es firme, relata cómo, con motivo de las fiestas pontevedresas, se instaló en la Alameda de Pontevedra un mercadillo dedicado a la venta ambulante. De este modo, el 22 de agosto de aquel año, el encausado «fue sorprendido por agentes de la Policía Local de Pontevedra en la calle General Rubín cuando salía del referido mercadillo después de haber estado ofreciendo a la venta prendas de ropa y se dirigía a una furgoneta».

Los policías comprobaron que en el interior de la Renault Master «transportaba numerosas prendas de vestir de diversas marcas que no eran originales, sino que imitaban a las auténticas». Además, se verificó que el investigado carecía de autorización para el uso de los signos distintivos que aparecían en ellas.

Es por ello que se procedió al decomiso de 108 sudaderas, una veintena de pantalones, ocho polos y 57 camisetas que aparentaban haber sido confeccionadas por Levi's, Tommy Hilfiger, Adidas, Gucci, Lacoste, Ralph Lauren, Puma, Armani o Nike. Se trata de prendas que, en algunos casos, no disponían del etiquetado correspondiente a cada una de las marcas, mientras que en otros empleaban etiquetas que reproducían la oficial aunque sin responder a los estándares de calidad de la firma.

La resolución judicial, asimismo, refiere que estas piezas de ropa «presentaban signos distintivos que imitaban a los que cada una de las marcas tienen registrados». Es por ello que, además de la sanción económica, el titular del Juzgado de lo Penal número dos de Pontevedra decretó el comiso de las prendas intervenidas, cuyo destino es normalmente la destrucción.

Al acusado, en todo caso, no solo le incautaron esta ropa, sino que también le intervinieron un total de 895 euros en efectivo procedentes de las ventas que había efectuado. La sentencia no alude a este dinero, así como refiere que el perjuicio causado a las marcas «no ha sido determinado». Las mismas, a excepción de Nike, «han renunciado a ser indemnizados solicitando la destrucción de la mercancía».