El rey había presidido esta ceremonia en el pasado en calidad de príncipe y en el 2014 se encargó el presidente del Gobierno. El monarca no estuvo esta vez acompañado de la reina Letizia
16 jul 2015 . Actualizado a las 22:23 h.El rey Felipe VI ha presidido este jueves, por primera vez como monarca, el acto de jura de bandera y entrega de despachos de la Escuela Naval de Marín (Pontevedra).
El rey había presidido esta ceremonia en el pasado en calidad de príncipe y en el 2014 se encargó el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
El monarca no estuvo acompañado de la reina Letizia en este acto, que comenzó puntual, a las 11.15 horas, con la llamada y formación del batallón de alumnos y que discurrió con normalidad marcial durante una hora y media, con el habitual homenaje a los caídos, jura de bandera, entrega de despachos, desfile de los nuevos oficiales y discurso del director de la escuela.
En esta ocasión han sido 49 alumnos los que han jurado bandera, 48 hombres y una mujer, y 80 los que han finalizado sus estudios, entre ellos un oficial tailandés. El curso 2015 es el primero en el que los oficiales que terminan sus estudios han recibido el grado adaptado al espacio europeo de enseñanza, con la titulación de ingenios industriales en la rama mecánica.
Por ello estaba presente en el palco de autoridades el rector de la Universidad de Vigo, con quien tiene conveniada la enseñanza la Escuela Naval; entre otra decena de cargos entre los que estaban el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, el ministro de Defensa, Pedro Morenés, la presidenta del Parlamento autonómico, Pilar Rojo, el presidente del Tribunal Superior de Xustiza, Miguel Ángel Cadenas, el fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes, el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, el delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, o los alcaldes de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, y Marín, María Ramallo.
Desfile ante el palco de autoridades
Los estudiantes desfilaron ante el palco de autoridades y el público, que vitoreó a los alumnos bajo un cielo parcialmente nublado que evitó los sofocos del sol de julio.
El comandante director de la escuela, Juan Luis Sobrino, volvió a cerrar la gala -que contó también con una breve intervención del arzobispo castrense- con un discurso en el que sacó a relucir su querencia por las metáforas náuticas cuando se refirió al periodo educativo de los alumnos salientes: «Han sido cinco años de singladuras con periodos de bonanza y borrascas, pero en los que la claridad en la determinación del puerto de llegada, y en la elección de la derrota para no dañar la valiosa carga que transportábamos, han obtenido la merecida recompensa de recalar en el destino sin la que la nave haya sufrido apenas daños».
El buque escuela Juan Sebastián Elcano, la fragata Méndez Núñez y los patrulleros Serviola y Tabarca fueron los barcos presentes en la Escuela durante el acto, a cuyo término el rey tuvo un encuentro privado en el que los padres de un niño de Pereiro de Aguiar agradecieron al monarca la mediación que llevó a cabo hace unos meses para que su hijo pudiese acceder a la medicación que precisa, y que se desarrolló de forma íntima.