Rafael Agulló, director de orquesta: «La música de bandas sonoras tiene el poder de ser muy directa, de utilizar un lenguaje muy audible»

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Ramón Leiro

Rafael Agulló dirige este sábado en el Teatro Principal el «Concerto Feroz» en el que se interpretará música de cine

30 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de que este jueves el Teatro Principal acogiese el acto donde se dieron a conocer los candidatos a los Premios Feroz que se entregarán en enero en Pontevedra, este sábado será el escenario de un concierto en el que el protagonismo recaerá en las bandas sonoras. Al frente de la Banda de Música de Pontevedra se situará Rafael Agulló Albors para una actuación que se enmarca «dentro de la temporada de conciertos que, afortunadamente y después de cuatro años casi parados, en octubre empezamos».

Ramón Leiro

—¿Cómo fue la selección de los temas?

—La idea es ofrecerle al oyente una banda sonora clave en cada uno de los géneros cinematográficos existentes. Esto no quiere decir que vayan a estar todos presentes, pero vamos a tener dentro del género romántico, la banda sonora de Titanic, dentro del terror, la banda sonora de Psicosis, dentro del género de Ciencia Ficción vamos a escuchar la de Star Wars... En total, ocho temas de ocho grandes clásicos, por decirlo de alguna de alguna forma.

Ramón Leiro

—¿No sé si tiene la misma sensación que yo de que la música orquestal de bandas sonoras ha ido ganando adeptos con los años?

—Creo que es algo que se viene cociendo desde hace mucho tiempo. Como anécdota personal, cuando tenía 14 o 15 años y empezaba a tener claro que me quería dedicar profesionalmente a esto de la música, si en gran parte lo hice fue por las bandas sonoras, por la música de cine. De aquellas, me daban una paga para salir los fines de semana con los amigos y reservaba el 25 % para cada dos o tres semanas poderme comprar una banda semana. Aún se lo contaba el otro día en el ensayo a los músico, que si entras a mi habitación en mi pueblo en Valencia hay allí como 250 o 300 compactos de bandas sonoras originales. Flipaba con Conan, el bárbaro, con Los diez mandamientos, con Regreso al futuro... Las escuchaba una y otra vez. Era algo para mí inspirador. Con el tiempo vas conociendo otras cosas y, evidentemente, a medida que vas formándote ya no le das tanta importancia a esa música de cine, que tiene el poder de ser muy directa, de utilizar un lenguaje muy audible y de fácil entendimiento, sobre todo, con la ayuda de las imágenes. Creo que ese es el secreto, los ingredientes principales que hacen que a la gente le guste tanto.

Ramón Leiro

—Si tuviera que elegir un compositor o dos, ¿se atrevería?

—Uno solo, no. Es imposible. Me encanta John Williams, me encanta Ennio Morricone, me encanta Elmer Bernstein, con Los diez mandamientos, Miklós Rózsa, con Ben-Hur...Es una de las bandas sonoras icónicas. Pero, bueno, si me tuviera que quedar con dos, quizás, a lo mejor, con Morricone y con John Williams. Me encantan los dos.

Ramón Leiro

—Yo soy un poco más moderno, Howard Shore y Danny Elfman.

—Tú opción también me valdría. No vamos a hacerle un feo a esos dos grandes genios.

Ramón Leiro

—¿Cómo han sido los ensayos de este «Concerto Feroz»?

—Hasta que dejamos de trabajar en el 2020 intentamos todos los años, dentro de la temporada de conciertos, dedicar uno de ellos por lo menos a la música cinematográfica. Me acuerdo de que hicimos un programa dedicado solo a John Williams, un programa dedicado a Ennio Morricone, un programa dedicado al cine de animación y la verdad es que estamos bastante familiarizados con estos temas. Además, los músicos al ser en el 95 % de los casos gente muy joven y el hecho de que las bandas sonoras, hoy en día, son una de las preferidas, la verdad es que la preparación fue muy fácil. En el ensayo de lectura que hicimos el viernes pasado, en la segunda parte, las bandas sonoras ya sonaban a bandas sonoras. Es una lectura rápida porque es una música que todo el mundo ha escuchado y de la que, si escuchas una vez, escuchas dos, escuchas tres. Engancha mucho.