«A seca favorece a limpeza, pero é un problema para a vida do Gafos»

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Gonzalo Sancho, presidente de Vaipolorío, este domingo, con una máquina de cambio de un lavado automático sacada del río Gafos en la primera jornada de la campaña de limpieza
Gonzalo Sancho, presidente de Vaipolorío, este domingo, con una máquina de cambio de un lavado automático sacada del río Gafos en la primera jornada de la campaña de limpieza ADRIAN BAULDE

La asociación Vaipolorío inicia en Pontevedra la vigésimo segunda campaña de actuación en el río

01 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Vaipolorío vuelve a meterse en el río para cuidar y mimar al Gafos. Miembros de la asociación ecologista iniciaron ayer en Pontevedra una nueva campaña de limpieza en este cauce. Es la número 22 desde que emprendieron esta iniciativa medioambiental allá por el año 2001. En este domingo que despidió el mes de julio el punto de encuentro para los participantes fue el albergue de peregrinos de la calle Otero Pedrayo, a las 10 horas. Había que madrugar como es costumbre y también para evitar las horas centrales en una jornada con máximas de 36 grados y alerta naranja por altas temperaturas.

La sequía y la situación de prealerta en el río Lérez que ha llevado a la Xunta y a los concellos a tomar las primeras medidas para ahorrar agua se nota también en el Gafos. Lo dice Xosé Feijoo Bernárdez: «Este ano non houbo enchentes e o río botou fóra só nalgúns puntos. A situación actual do Gafos tamén é preocupante, a seca favorece a limpeza, pero é un problema para a vida do río, para a fauna, peixes e macroinvertebrados, xa que seca por tramos».

Cuando nacieron las campañas de limpieza anuales de Vaipolorío, junto a otras asociaciones, se desarrollaban veinte jornadas con la participación de hasta cincuenta voluntarios. En los últimos años se han reducido las salidas y las manos para sacar basura. En el 2019, antes de la pandemia, fueron seis jornadas y este año serán cinco, la de ayer y las cuatro de los domingos de agosto. Los trabajos para retirar residuos del cauce del Gafos no se pararon por el covid. En esta edición colaborarán con Vaipolorío dos entidades: el Centro de Reeducación Avelino Montero de Pontevedra y la Fundación Juan XXIII Discapacidade e Emprego.

El pasado jueves se habían anotado para la jornada inaugural de la campaña 21 personas. Se actuó en el tramo de Pontevedra, divididos en dos grupos. Aunque siempre se extraen residuos, desde Vaipolorío cuentan que este año esperan retirar menos kilos. En el 2019 habían sido 619 los extraídos en seis jornadas, y el pasado año, 665 kilos con una salida menos. Con el paso de los años también fueron mejorando la seguridad y los medios materiales de los que disponen gracias a convenios con distintas entidades. Antes de cada jornada, abierta siempre al que quiera participar, hay que anotarse. Se trata de saber con cuántas personas se cuenta para organizar la salida y también para dar unos consejos previos y distribuir el material.

Una máquina de un lavado

Este domingo participaron finalmente veinte voluntarios y se retiraron del río unos 105 kilos de residuos. Gonzalo Sancho, presidente de la asociación, extrajo del cauce una máquina de cambio de un lavado automático: «Supoñemos que a roubaron e que acabou no río como elemento disuasorio, non por outra cousa. Non levaba moito tempo». El resto de residuos fueron algún móvil, un balón, y botellas y latas.

Pese al discurrir de los años y el gran trabajo realizado, siempre hay basura que eliminar. «Residuos aínda quedan e afloran coas enchentes os que levan anos sedimentados. Este ano non as houbo e esperamos sacar menos cantidade», expone Feijoo Bernárdez. Desde Vaipolorío subrayan también el incremento de peregrinos por el tramo del río que discurre por la parroquia de Tomeza. «Por ese Camiño complementario pasan centos ou miles de peregrinos. Aínda que a presenza humana sempre altera a vida do río, hai que dicir que a maioría son moi respectuosos co contorno», comenta.