Un edificio de Loureiro Crespo, objeto de una oleada de robos en una tarde
PONTEVEDRA
Hasta seis pisos del mismo inmueble fueron violentados el mismo día
25 ago 2021 . Actualizado a las 11:02 h.El barrio de Loureiro Crespo sufrió un evento traumático este pasado fin de semana, ya que uno de sus edificios, el número 23, sufrió una serie de robos en un período de dos horas. Los sucesos tuvieron lugar en la tarde del domingo, cuando los ladrones realizaron hasta media docena de hurtos sin que ninguno de los vecinos se dieran cuenta. Esta situación coincide con un momento de tensión, en el que los residentes del área se encuentran preocupados ante el ambiente inseguro del barrio.
A última hora del martes, la Policía Nacional tan solo tenía constancia de cuatro denuncias por robo, a pesar de que los vecinos han llegado a hablar de seis hurtos. En los pisos que han puesto una denuncia, dicen desde la policía que se han realizado las correspondientes inspecciones oculares. Entre los bienes sustraídos se encuentran tanto dinero como joyas.
La investigación continúa en marcha y por ahora se presume que los criminales pudieron acceder, en alguno de los casos, a través de un andamio de obra que se encuentra en el inmueble. Por ahora no se conoce la identidad de los perpetradores, pero una cámara de videovigilancia que había en uno de los pisos captó a una mujer en vídeo.
Los hechos ocurrieron en un momento de altas temperaturas, en el que muchos de los residentes no se encontraban en casa. «Domingo, calor, Galicia... Estaba todo el mundo en la calle», relató una vecina del inmueble sobre los acontecimientos. Los robos, según fuentes vecinales, tuvieron lugar en un período de alrededor de dos horas, sobre las cinco y las siete de la tarde, aunque muchos no notaron sus efectos hasta la noche. «Cuando todo el mundo llegó a sus casas por la noche se encontró con que estas habían sido desvalijadas», afirma la habitante del edificio.
Los afectados fueron seis apartamentos y los métodos que emplearon los ladrones fueron diversos. «Unas puertas las forzaron, las reventaron, le sacaron la mirilla. Y luego accedieron a través de las ventanas», relataron desde el inmueble pontevedrés.
«Estamos asustados todos los vecinos porque han avanzado impunemente por el edificio y han entrado a varias casas», contó una de las vecinas. Es tanto el miedo, que se está planteando instalar medidas de seguridad en la propia comunidad con la contratación de seguridad privada.
Incidencias en la zona
A raíz del incidente, los vecinos han querido destacar la situación en la que se encuentra la calle. «Hay peleas, ruido, jaleo e incluso ha venido la policía en varias ocasiones. Entonces eso genera inseguridad en el barrio», relataron desde el número 23, «no solo en este edificio, que ya hace tiempo que lo hemos manifestado, sino los de al lado también».
Es por eso que, ante las circunstancias, los habitantes piden más seguridad. «La gente tiene miedo, todo el mundo se está blindando hasta las cejas. Aquí hay mucho movimiento de seguridad. Solicitamos más vigilancia para la zona», afirmaron desde el edificio.