Lores, el mejor interlocutor de Feijoo

PONTEVEDRA

El regidor pontevedrés dispone del mejor «feeling» con el presidente de la Xunta de Galicia de entre los alcaldes de las principales urbes gallegas

23 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Paradojas de la política: Miguel Anxo Fernández Lores se ha convertido en el alcalde de entre las principales ciudades de Galicia que dispone del mejor nivel de interlocución y entendimiento con el actual presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo. A pesar de la enorme distancia ideológica que les separa y de la existencia de temas como Ence que son obstáculos insalvables para que puedan coincidir, Lores y Feijoo parecen haberse aclimatado uno con el otro y viceversa hallando un espacio de colaboración, aderezado por un cierto buen rollo personal. Diríase que ha terminado por haber cierta química entre ambos.

En esta semana que termina tuvimos oportunidad de corroborarlo con motivo de la visita compartida por alcalde pontevedrés y presidente gallego al remozado edificio administrativo de la Xunta en la calle Benito Corbal. El presidente del gobierno gallego regaló los oídos del alcalde pontevedrés. Le encomió por haber tendido los puentes necesarios para el mejor entendimiento entre ambas Administraciones, que se ha traducido en una serie de proyectos en desarrollo como el segundo edificio judicial de A Parda, la solución intermodal para las estaciones de tren y buses, la mejora del puente de A Barca o mismo la reforma de ese inmueble de Benito Corbal, abandonado durante años por la Xunta que ahora servirá para fines sociales.

¡Quién le iba a decir hace unos años a Alberto Núñez Feijoo que después del 26 de mayo de 2019, iba a elogiar a un regidor del BNG por la capacidad de llegar a acuerdos, a diferencia de lo que no le pasa con Abel Caballero o Lara Méndez! Y aún le aguarda un panorama peor del que tuvo antes con los alcaldes de las Mareas que gobernaban A Coruña, Santiago y Ferrol. Al fin y al cabo ¿qué puede esperar el titular del gobierno gallego de Gonzalo Pérez Jácome, el peculiar alcalde ourensano al que solo hace unas semanas repudiaba, y ahora debió plegarse a apoyar su investidura a cambio de que la familia Baltar mantenga su reinado dinástico en la Diputación de esa provincia?

Un clásico poselectoral

Después de coincidir el pasado lunes, Lores envió por carta una solicitud de audiencia al presidente de la Xunta de Galicia que a buen seguro será inmediatamente atendida. Esta entrevista en San Caetano, revestida siempre de una formalidad especial, ya es un clásico. Especialmente desde el 2015 cuando comenzó la distensión necesaria para normalizar esa relación institucional que antes chirriaba. Probablemente la renuncia de la Xunta al proyecto del Nuevo Hospital en Monte Carrasco, que llegó de la mano con el entonces nuevo conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, fluidificó las relaciones.

En el transcurso de este último cuatrienio Lores y Feijoo han repetido encuentro como ocurrió en el 2017 y el 2018. El último data del 22 de octubre pasado. Normalmente se atienen a un guion preestablecido: Lores llega con un zurrón lleno de peticiones y suele arrancar el compromiso de Feijoo de que la Xunta colaborará en ciertos temas. Hacen seguimiento de otros asuntos como el Gran Montecelo en los que hay concordia. Y luego están los contenciosos de larga duración, como el transporte urbano o la ampliación de la EDAR de Placeres, que quedan aparcados a la espera de un consenso utópico.

La lista de la compra

En esta ocasión, Fernández Lores incorporará algunas peticiones de nuevo cuño aunque repetirá gran parte de la lista de la compra que ha llevado otras veces. Entre las novedades pedirá la colaboración de la Xunta de Galicia para ampliar la senda urbana del Gafos. Se trata de una jugada magistral que el Concello pretende llevar a cabo con la complicidad de la Administración autonómica para eliminar el problema del asentamiento chabolístico de O Couto so pretexto de prolongar el paseo que tanto éxito ciudadano ha obtenido. La expropiación de terrenos para ampliar la senda junto al río, serviría para habilitarla como ruta de peregrinos que desde el puente da La Condesa desembocase frente al Albergue, eludiendo el peligroso cruce de la rotonda de O Marco y la carretera de Tomeza-Figueirido. La propuesta engarza además con la necesaria potenciación de ese tramo del Camino Portugués, en puertas del próximo Xacobeo.

La colaboración que el alcalde instará al presidente Feijoo requeriría de la ayuda de los servicios sociales para el desalojo y reubicación de las familias que actualmente residen en esas infraviviendas dedicadas al negocio de la chatarra. No será fácil, pero la idea resulta prometedora.

Más complicada, por los vericuetos administrativos, parece la otra propuesta novedosa que Lores anunció que llevará ante Feijoo: que la Xunta de Galicia abandone los terrenos que ocupa en la Xunqueira de Alba con el propósito final de recuperar las marismas para el disfrute público. Lores se ha lanzado a esa misión con el apoyo de la Diputación de Pontevedra, que parece en sintonía para sacar de allí la Imprenta Provincial y el Parque de Maquinaria. El propósito del Concello es muy dificultoso, pues tendría que persuadir también al Estado para que también traslade las instalaciones que tiene en esa zona, entre otras, el parque de la Dirección General de Tráfico donde se realizan los exámenes para la obtención de carné de conducir. Y aportar tanto a Xunta como Estado ubicaciones alternativas.