Los pontevedreses se lo pasan de miedo con el Samaín

La Voz

PONTEVEDRA

emilio moldes

01 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En Samaín en su versión celta más ancestral o en Halloween en su versión más moderna. Mayores y pequeños se suman a esta celebración, en el que las ganas de diversión se entremezclan con el interés por la recuperación y conservación de una tradición relacionada con la noche de difuntos. Los comerciantes pontevedreses llevan ya días con sus escaparates decorados para la ocasión y las tiendas de disfraces lo viven como un entroido en el que esta vez toca disfrazarse de zombis, meigas, vampiros y monstruos para asistir a las fiestas escolares o las que organizan pubs y discotecas, animando a la gente a acudir vestida de la forma más terrorífica posible.

Sin duda, los que mejor se lo pasan son los niños y ayer no hubo colegio que no tuviera su Halloween o Samaín.

El Concello también se sumó a la fiesta con la Noite dos Calacús en la Praza da Verdura, donde se decoraron y encendieron calabazas calavéricas. Y en el Museo conocieron a Ágata, la gata meiga protagonista de un cuento de Samaín.